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Geografía física

éxico es un Estado de América del Norte. Limita con Estados Unidos al N, golfo de México (océano Atlántico) al E, Belice y Guatemala al SE, y el océano Pacífico al S y al O. La capital es Ciudad de México.

Geológicamente situado a caballo entre América Central y América del N, México es un país montañoso, en el que se distinguen tres grandes unidades de relieve. Al N se extiende la mayor de ellas, la altiplanicie mexicana (el Altiplano), una meseta elevada que ocupa casi la mitad del país. Constituye una prolongación geológica de las grandes llanuras centrales norteamericanas y presenta una gran variación altimétrica, ascendiendo en una serie de escalones sucesivos desde los 1 000-1 200 m del N y E, hasta los 2 400 m del SE. Puede distinguirse en él dos partes claramente diferenciadas: la Mesa norte, que ocupa las dos terceras partes de la altiplanicie, y la Mesa central, con paisajes y materiales de origen volcánico.

El Altiplano se encuentra enmarcado por elevadas alineaciones montañosas: la Sierra Madre Occidental al O, la Sierra Madre Occidental al E, y el Sistema Volcánico Transversal o Sistema Tarrasco-Nahua al S. La Sierra Madre Occidental se extiende del N al centro del país, paralelo a la costa del golfo de California, a lo largo de 1 200 km, con algunos picos superiores a los 3 500 m. En su parte N, la Sierra Madre Occidental queda algo más separada del golfo de California por el desierto de Sonora. Enfrente, en la península de Baja California, se levanta la cordillera surcaliforniana, que en tan estrecho espacio se levanta hasta los 3 088 m, cayendo bruscamente sobre el océano. En la costa opuesta, separada del golfo de México por una planicie, la Sierra Madre Oriental se extiende como una prolongación de las Montañas Rocosas y llega a alcanzar los 3 664 m en Peña Nevada.

El Eje Neovolcánico es la segunda gran unidad orográfica del país. Constituye la ruptura con las estructuras montañosas norteamericanas, las cuales atraviesa transversalmente, extendiéndose de E a O a lo largo de 880 km entre el océano Pacífico y el golfo de México. Se trata de una de las formaciones volcánicas más importantes del mundo, con una intensa actividad y, por tanto, inestabilidad. A pesar de ello es, con mucho, la zona más poblada del país por las aptas condiciones climáticas y medioambientales de que disfruta. Es también donde se encuentran las cimas más elevadas, con el Orizaba Citlaltépetl (5 700 m) como pico culminante, el Popocatépetl (5 492 m), el Iztaccihuatl (5 200 m), el Nevado de Toluca (4 558 m), etc., así como la mayor concentración de lagos y lagunas. 

Finalmente, interrumpido el Eje Neovolcánico por la gran depresión Austral (depresión del Balsas), se extiende la tercera gran unidad geomorfológica del país: son las formaciones montañosas del sistema orográfico centroamericano que, tomando una dirección NO-SE, tienen su continuidad hacia Guatemala y Nicaragua por el istmo de Centroamérica. Desde el Eje Neovolcánico se extienden, en primer lugar, las cordilleras de Sierra Madre del Sur (3 703 m en el cerro Teoptepec), y la Sierra Madre de Oaxaca, ambas paralelas a la costa del Pacífico. El istmo de Tehuantepec la separa de la Sierra Madre de Chiapas (4 092 m en el volcán de Tocaná), que tiene su continuación en territorio guatemalteco, constituyéndose como el inicio de la Sierra Madre centroamericana.

Más al N sobresale, como un apéndice de la triangular forma del país y compartida también con Belice y Guatemala, la península de Yucatán, que presenta unas características geomorfológicas totalmente distintas a las del resto de México: constituye una meseta calcárea, con las formas típicas de un relieve cárstico, y sin alturas superiores a los 500 m. El litoral mexicano es, en general, poco favorable para el establecimiento de puertos. La mitad N, tanto de la costa atlántica como de la del Pacífico, es ocupada por estrechas llanuras litorales que forman en su parte más baja una sucesión de albuferas, ensenadas, lagunas litorales y zonas pantanosas. En el centro del país, el Eje Neovolcánico cierra estas llanuras y hace llegar las alturas volcánicas hasta los mismos océanos.

El perfil litoral sigue siendo abrupto e irregular a lo largo de toda la costa S del Pacífico, presidida por las alturas de la Sierra Madre, sólo atenuadas en el golfo de Tehuantepec. En la parte meridional de la costa atlántica reaparece otra zona llana, con múltiples áreas pantanosas y gran riqueza petrolera, que enlaza ya con el rocoso litoral calcáreo del Yucatán. Por la latitud en que se encuentra la mayor parte del territorio mexicano, en la zona subtropical e intertropical del planeta --igual que la del desierto del Sahara--, también su clima, su vegetación y su poblamiento debieran ser similares. Sin embargo, ello sólo se da en la parte NO del país, mientras que en el resto las características orográficas (casi un 70 % del país se encuentra elevado a más de 500 m), constituyen un importantísimo factor de alteración climática, estableciendo una notable diversidad.

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