/natureduca/actividades-ecologicas-actividades-propias-elaboro-mi-vino-y-sus-derivados-06

---

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14

El cultivo de la vid (continuación)

Bimbios

n nuestra zona se siguen utilizando los bimbios como elemento tradicional para el atado de la viña. Su época de recolección coincide con el inicio de la poda (octubre), y raro es el productor de uva del lugar que no dispone de sus correspondientes macizos de bimbios para esta labor. En la época de poda se cortan todos los bimbios pero se dejan siempre las varas más gruesas (las llamadas popularmente "chantóns") con las puntas cortadas, para que produzcan en el siguiente año.

Los tipos de bimbios conocidos y más utilizados en el lugar son los mansos, verdes, blancos y las chamadizas. Éstas últimas eran las únicas que se conocían antiguamente, hasta que se introdujeron las nuevas variedades. También se conocen los llamados bimbios bravos, que deben dejarse reposar al sol previamente antes de ser utilizados, ya que rompen fácilmente en fresco.

5 tipos de bimbios utilizados en la zona; de izquierda a derecha: bravos, mansos, verdes, blancos y chamadizas

Reproducción

La mayoría de bimbios pueden cultivarse por esqueje, lo que en nuestra zona llamamos popularmente "prender de pola" (nacer de rama), y que en realidad es una operación de estaquillado. Se trata de una forma de reproducción vegetativa (sin semillas) que conserva todas las condiciones de la planta original. Para ello, tomamos los esquejes de aproximadamente un metro de largo y los enterramos (estaquillamos) en hileras en hoyos practicados con un hierro de monte, con una separación mínima entre ellos de 50 cm. Si el esqueje arraiga, formará un macizo del cual podremos extraer anualmente los bimbios que necesitemos.

Estaquillado de unos esquejes de bimbios (chantóns)

La operación de estaquillado da mejor resultado si se realiza en zanjas o cabañones abonados. Para ello, se practica una canal alargado de unos 20 a 30 cm. aproximadamente, y se clavan los esquejes en hilera a lo largo. Seguidamente, se cubre la cavidad con abono orgánico y el producto típico de limpieza de los montes, tales como el tojo, fentos, faisca, y el batume o materia resultante de su descomposición. Se cubre con tierra fresca y se riega.

Tipos de bimbios

Seguidamente detallaré los tipos de bimbios más utilizados, sus características y modos particulares de reproducción.

Bimbios mansos

También llamados "bimbias", son de color verde amarillento, y se distinguen por poseer unos nudos o seudo-brotes distribuidos regularmente a todo lo largo (no son lisos como los bimbios blancos). Son, junto con los verdes, los preferidos por los viticultores tradicionales. Tienen todas las características deseables: son flexibles, no rompen, sus nudos son seguros y cada puntada dura varios años en la viña. Su lado menos positivo es la reproducción, ya que no prosperan bien mediante el estaquillado u otras formas de propagación, sino que precisan ser injertados de cañutillo sobre un patrón de salgueiro.

Detalle de los bimbios mansos o "bimbias", donde pueden observarse los nudos que posee a lo largo del tallo

Para realizar el injerto de cañutillo una vez que disponemos del arbusto de salgueiro ya plantado y arraigado, en la época de recolección cortaremos los ejemplares de bimbios mansos y los dejaremos reposar hasta que llegue el momento de la germinación, momento en que podrá extraerse el llamado "casulo" (en ese periodo el tejido de corteza superficial se desprende con más facilidad).

En primer lugar comprobaremos que tanto la vara del portainjertos de salgueiro (al que en adelante llamaremos patrón) como la del bimbio manso que deseamos injertar son del mismo diámetro. El objetivo consiste en cubrir el perímetro del tronco del patrón con un rodete de corteza con yema del bimbio. Para ello, se toma una rama de bimbio manso con nudos y se deja unas horas en remojo para que ablande; posteriormente se hace un corte horizontal y circular sobre la parte superior del nudo y otro sobre la inferior más o menos a 3 centímetros de distancia; se traza otro corte vertical entre ambos cortes horizontales y se procede a extraer la corteza con cuidado (el casulo). Ahora, se realiza la misma operación sobre el patrón asegurándonos de que sea de la misma altura (los citados 3 centímetros), y se extrae la corteza para dejarlo al desnudo. Seguidamente, colocamos la corteza del injerto de bimbio sobre el tronco desnudo del patrón rodeándolo por completo y asegurarlo con rafia al menos 15 días.

En este macizo de salgueiro pueden observarse los bimbios mansos injertados (los de color verde-amarillento), entremezclados con brotes ladrones de la planta patrón (los de color verde con hojas), los cuales deben ser eliminados si se desea que los injertos se mantengan sanos y productivos cada temporada.

Una obligación ineludible a realizar para que los injertos de bimbios mansos se mantengan saludables y productivos año tras año, es limpiar cada temporada todos los brotes bravos de la base (los llamados ladrones), ya que éstos pertenecen a la planta patrón (el salgueiro) y podrían hacer secar los injertos que contengan.

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14

© ASOCAE ONGD, Asociación Española para la Cultura, el Arte y la Educación - www.asocae.org - RNA 592727 - CIF.: G70195805 ¦  Quiénes somos  ¦  Contacto  ¦  Bibliografía ¦  Política de privacidad ¦ Esta web NO utiliza cookies, ni guarda datos personales de los usuarios