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Zoología
CORDADOS
Reptiles - 1ª parte
os reptiles son Vertebrados amniotas (con embrión provisto de amnio o membrana que envuelve al feto), y poiquilotermos (con incapacidad para regular la temperatura de su propio cuerpo). Aparecieron a finales del periodo Carbonífero superior (hace unos 280 millones de años), y fueron muy abundantes durante toda la era secundaria (hasta hace unos 65 millones de años).
Características generales
Los reptiles presentan cuerpo de forma variable, generalmente recubierto con un exoesqueleto de escamas epidérmicas córneas, a veces con placas dérmicas óseas; las que cubren la cabeza (y en ocasiones otras partes del cuerpo), reciben nombres especiales que determinan habitualmente el tipo de especie. La piel carece de glándulas y puede presentar coloraciones muy variadas; en las tortugas y galápagos la piel es muy gruesa, transformándose en los escudos del caparazón.
Tortuga marina de las aguas de Hawai
La musculatura está especialmente desarrollada en las extremidades adaptadas para la locomoción; éstas, salvo en las serpientes, son habitualmente pentadáctilos (poseen cinco dedos). En la mandíbula de determinados reptiles cobra importancia la presencia del hueso dentario. La cintura torácica se compone de: clavícula, interclavícula, precoracoides y coracoides; y la pelviana, de ilion, isquion y pubis.
La respiración de los reptiles es pulmonar; el aire penetra a la boca por los orificios nasales, sigue por la tráquea, que posee una tapa cartilaginosa (glotis), y llega a los pulmones a través de los bronquios. Los reptiles no pueden recibir oxígeno a través de la piel, por eso disponen de pulmones bien desarrollados divididos en múltiples alvéolos, para conseguir una mayor efectividad de la función pulmonar. Los ofidios carecen de pulmón izquierdo o lo tienen muy reducido.
Los reptiles presentan el cuerpo generalmente recubierto con un exoesqueleto de escamas epidérmicas córneas. Pueden mostrar coloraciones muy variadas. En la imagen una serpiente de morro largo
(Ahaetulla nasuta)
El sistema nervioso de los reptiles, en comparación con los anfibios, destaca por poseer un encéfalo mucho más complejo. Los órganos sensitivos (ojos, oído, olfato y equilibrio) están bien desarrollados. El órgano vomeronasal complementa el sentido del olfato. Un sentido característico de algunos reptiles (serpientes) es el órgano de Jacobson, consistente en dos fosas que se sitúan entre los ojos y la nariz, y con capacidad para detectar las presas mediante el calor que emiten.
A excepción de algunos lagartos y tortugas terrestres herbívoros, la mayoría de reptiles son depredadores, algunos muy voraces y temibles, ejemplo de las serpientes constrictoras o los cocodrilos. Todos, a excepción de las tortugas, poseen dientes; en la cavidad bucal disponen de numerosas glándulas, especialmente las glándulas venenosas de los ofidios, cuya sustancia tóxica es capaz de desencadenar graves reacciones orgánicas y celulares que pueden desembocar en la muerte.
Los reptiles son mayoritariamente depredadores. Algunos poseen glándulas que segregan venenos muy potentes capaces de causar la muerte
Los reptiles son fundamentalmente ovíparos y de sexos separados; también se da el viviparismo y ovoviviparismo, como en las víboras y otras serpientes. La hembra suele enterrar los huevos y dejar que se incuben al calor del sol. La fecundación es interna (los machos poseen órganos copuladores).