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Física
ELECTRICIDAD
Electrostática y fuentes de energía eléctrica - 5ª parte
Electricidad por presión
a electricidad producida por presión se
denomina piezoelectricidad. Está generada por la comprensión y decomprensión de
determinados materiales de cristal, como el cuarzo.
Qué es un cristal
Un cristal es una sustancia en donde las moléculas están colocadas de una manera uniforme. Puede ser un cuerpo simple o compuesto, pero generalmente es simple. Las materias cristalinas naturales son escasas, así, los diamantes y la mayoría de las piedras preciosas son cristales.Por motivo de simplicidad se supone que las moléculas cristalinas son esféricas. En el estado no cristalino las moléculas están situadas de forma irregular, mientras que en el estado cristalino se sitúan de una manera uniforme y regular.
Características piezoeléctricas de los cristales
Los cristales de algunas sustancias, tales como las sales de Rochela o el cuarzo, tienen características piezoeléctricas peculiares. Cuando se comprime un cristal de cuarzo, los electrones tienden a moverse en una dirección. Esta tendencia crea una diferencia de potencial en las caras opuestas del cristal que puede ser medido con un voltímetro. Si se conectase un hilo conductor entre la cara positiva y la negativa del cristal los electrones fluirían del polo negativo hacia el positivo a través del hilo.
Si presionamos las dos
caras de un cristal se produce una diferencia de potencial en sus
extremos que puede ser medida con un voltímetro
Pero además, los cristales tienen la característica de ser reversibles, es decir, pueden desarrollar una energía mecánica a partir de una energía eléctrica. Así, si aplicamos una fuerza electromotriz a ambas caras de un cristal, éste se dilatará o contraerá en proporción directa a la fuerza aplicada.
Los cristales son
reversibles: si se aplica una energía eléctrica en sus extremos se
dilata o contrae en proporción a la fuerza aplicada
Dos cristales con
encapsulados diferentes: en el de la derecha se puede observar el disco de
cristal en el interior con una de sus placas metálicas adosada en el
centro
Un
cristal de uso ordinario en los equipos electrónicos no supera el tamaño
de una moneda de 10 cts. de Euro; pero en algunos aparatos miniaturizados, como
los teléfonos móviles, puede ser de tamaño inferior a la cabeza de una
cerilla.
Aplicación de los cristales
Los cristales tienen una amplia aplicación en diversos circuitos electrónicos: se utilizan por ejemplo como elemento captador en los micrófonos sensibles y de calidad. También en los circuitos sintonizados de los aparatos de radio, con objeto de hacer resonar una bobina tanque a la frecuencia de recepción de una emisora, o como señal armónica de la misma. Por ejemplo, una emisora de radio que se reciba en la banda de frecuencia modulada de 100 Mhz (100 millones de hercios o ciclos por segundo), puede sintonizarse con un cristal que resuene (vibre) en su misma frecuencia fundamental (100 Mhz), o en un armónico de la misma: 50 Mhz (segundo armónico), 33,33 Mhz (tercer armónico), 25 Mhz (cuarto armónico), etc.Las comunicaciones espaciales o la radio y televisión por satélite, por ejemplo, no alcanzarían el actual nivel tecnológico sin la existencia de los cristales. Una emisora de satélite utiliza frecuencias del orden de los gigahercios, es decir, miles de millones de hercios, lo que implica utilizar cristales que resuenan (vibran) con gran estabilidad a frecuencias de miles e incluso millones de veces por segundo, y que después son multiplicados electrónicamente para obtener esas altísimas frecuencias utilizadas en este tipo de emisiones.
El nivel tecnológico
actual de las comunicaciones espaciales o la radio y televisión por
satélite, no sería alcanzable sin la existencia de los cristales
Hasta hace poco tiempo, antes de la aparición de los discos musicales compactos, los reproductores de discos musicales de vinilo utilizaban un cristal como elemento captador. Así, cuando la aguja se movía entre el surco del disco, su movimiento era aplicado a las caras de un cristal, el cual convertía ese pequeño movimiento mecánico en su equivalente en energía eléctrica. Seguidamente esa pequeña energía se amplificaba y podía ser reproducida en los altavoces en forma de sonido.
Prácticamente, la mayoría de los equipos electrónicos que nos encontramos a diario tienen algún tipo de circuito que incluye un cristal de cuarzo. Así, está presente cuando nos subimos en el ascensor, en nuestro encendedor de cocina o en el calentador de agua, al cruzar una puerta automática, cuando usamos nuestro ordenador personal, al arrancar nuestro coche de inyección electrónica, cuando vamos a cruzar en un paso regulado por semáforos, y en otros numerosos órdenes de nuestra vida cotidiana.