LA ORQUÍDEA Y LA DIOSA DEL MANTO DIVINO
Escribió el botánico holandés Blume: “una Diosa, de belleza extraordinaria, cubierta con un precioso manto de seda, se apareció a los indígenas para inspirarles sentimientos elevados, pero éstos, pervertidos y groseros, la persiguieron hasta hacerla refugiarse en lo mas intrincado de la montaña. Triste y abatida extendió sobre las piedras…