¿Por qué las plantas son tan importantes para el medio ambiente?

INTRODUCCIÓN

Partimos de la base que todos los seres vivos necesitan oxígeno para vivir. Es cierto que algunos microorganismos, como bacterias y hongos (y recientemente unos metazoos anoxios descubiertos en el mar Mediterráneo a 3.000 metros de profundidad), son anaerobios, es decir, pueden vivir sin metabolizar el oxígeno en sus células. Pero, salvo estas contadas excepciones, la inmensa mayoría de los seres que pueblan la Tierra desaparecerían en ausencia de oxígeno.

Todos los animales respiran oxígeno de la atmósfera o del existente en el agua para ejercer la función de la nutrición celular. El modo en que realizan la respiración puede ser diferente según la especie, y por tanto el tipo de adaptación que haya desarrollado. No respira igual un mamífero, un pez, un reptil o un anfibio, pero algo que es común a todos ellos, es que en el acto de la respiración obtienen oxígeno (O2) y liberan dióxido de carbono (CO2); el primero es fundamental para la vida, y el segundo es un veneno que no se puede acumular y obligadamente debe ser expulsado.

Pero, aunque alrededor de la mitad de la masa de la corteza terrestre es oxígeno, el que se halla libre en la atmósfera no es estable; no podríamos vivir consumiéndolo indefinidamente, porque las reacciones químicas a las que está sometido lo harían desaparecer en un tiempo indeterminado. Es aquí, donde las plantas cumplen esa maravillosa función de restituir el oxígeno perdido y consumir el venenoso dióxido de carbono, gracias a una admirable función que hace unos 2.000 millones de años aprendieron a realizar unas algas azules o cianobacterias: la fotosíntesis.

QUÉ ES LA FOTOSÍNTESIS

Aunque químicamente esta función es bastante compleja, en términos simples la fotosíntesis es el proceso que realizan las plantas verdes (con clorofila) para fabricar su propio alimento, a partir de la luz solar y el dióxido de carbono existente en la atmósfera. Aunque las plantas también respiran oxígeno, en la práctica realizan la función contraria a la de la respiración celular de los demás seres vivos, es decir, mientras la respiración celular requiere O2 y liberar CO2, la fotosíntesis requiere CO2 y liberar O2.

La fotosíntesis es realizada por plantas verdes (con clorofila). Imagen: natureduca.com

Por tanto, las plantas son el complemento indispensable de todos los seres vivos, sin ese complemento no hay vida. Así, los seres vivos pueden desarrollarse gracias a la alimentación orgánica y el oxígeno recibido; y las plantas pueden igualmente crecer y desarrollarse gracias al dióxido de carbono expulsado por los animales a la atmósfera, y el alimento que reciben a través de las raíces. Toda la biodiversidad animal existente, es sin duda gracias a la existencia de plantas y a su proceso fotosintético.

Ese intercambio químico entre plantas y demás seres vivos, forma parte de un importante proceso natural de la Tierra conocido como «ciclo del carbono», por el cual la respiración celular y la fotosíntesis mantienen estables los niveles de oxígeno y dióxido de carbono en la atmósfera. Por tanto este ciclo es un mecanismo fundamental en la estabilidad del medioambiente.

EL PROCESO FOTOSINTÉTICO

El proceso fotosintético o función clorofílica, sólo lo pueden realizar las plantas que poseen clorofila en sus hojas (las plantas verdes). Esta sustancia es la responsable de atrapar y absorber la energía del sol y procesarla en los llamados cloroplastos.

proceso fotosintético
Proceso fotosintético. Ilustración: natureduca.com

El proceso fotosintético se resume en cuatro apartados:

Absorción: Es la función de las plantas de obtener agua y sustancias minerales del sustrato a través de las raíces.

Circulación: Es la función de hacer llegar a través del tallo, y distribuir por todas las hojas, el agua y minerales obtenidos por las raíces.

Fotosíntesis: Es la función de convertir la energía lumínica en energía química, capturando la luz y el dióxido de carbono y transformando la savia bruta en sabia elaborada, que es el verdadero alimento de la planta. En ese proceso se expulsa el oxígeno a la atmósfera.

Respiración: Es una función similar a la que realizan los demás seres vivos. Las plantas también respiran oxígeno, y lo hacen durante las 24 horas, pero por la noche no pueden recibir energía del sol y sólo expulsan CO2. ¿Entonces cómo es posible que las plantas mantengan estables los niveles de oxígeno en la atmósfera, si también la consumen? El motivo, es que las plantas sólo emiten durante el periodo nocturno una parte de todo el CO2 que procesaron durante el periodo diurno, por ese motivo siempre hay un excedente de oxígeno aportado por las plantas a la atmósfera.

LAS PLANTAS Y LA LUCHA CONTRA LA CONTAMINACIÓN

En los dos últimos siglos las actividades humanas han incrementado de forma acelerada la concentración de CO2 en la atmósfera. El cambio climático es una consecuencia directa de ese aumento. No obstante, los científicos no hallaban explicación al porqué siguiendo las emisiones de gases de efecto invernadero en progresivo aumento, el ritmo de concentración de CO2 se mantenía sin embargo estable. La pregunta era ¿a dónde había ido a parar ese gas?

La respuesta vino de la mano de un estudio realizado por investigadores europeos, que lo publicaron en la revista «Nature». Según el estudio, el aumento de CO2 en la atmósfera provocó que los ecosistemas terrestres reaccionasen doblando su capacidad como sumideros de carbono, incrementando la función de la fotosíntesis.

Bosque tropical. Estos ecosistemas han reaccionado favorablemente al incremento de CO2 en la atmósfera. Imagen: Wikimedia Commons

Esto significa, que las plantas están colaborando intensamente en contrarrestar los efectos del cambio climático consumiendo más CO2, convirtiéndose en aliados de los humanos en la lucha contra la contaminación. Una nota negativa del estudio, es que debido al gran esfuerzo que las plantas están realizando, su vida también se está acortando.

CONCLUSIÓN

Las condiciones del medioambiente y la vida en toda la biosfera, dependen directamente de la función fotosintética de las plantas, y más aún, toda la biodiversidad existente ha sido a causa de ella. Las plantas también han demostrado su capacidad como sumideros de CO2 más allá de lo esperado, reaccionando al incremento de las actividades humanas de contaminación de la atmósfera, doblando esa capacidad de proceso.

¿Te gusta? pincha para compartir en tus redes sociales….

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *