Descubriendo las tierras checas: Los montes Beskid (Beskydy)

El 3 de septiembre de 2014 se lanzaba la preciosa hojita bloque dedicada a la protección de la naturaleza que, como cada año, no nos deja indiferentes: nada menos que una veintena de especies son recogidas en la soberbia composición realizada por Libuse y Jaromir Knotek y el grabado de Martin Srb. Son cuatro sellos, tres viñetas sin valor postal y el resto de la hoja que también puede aprovecharse temáticamente y, en este caso, no se puede desmontar.

Descubriendo las tierras checas: Los montes Beskid (Beskdy)

El facial de 13 coronas para la Meles meles; 17c Felix silvestres, 21c Urdus arctos y 25c Canis Lupus y Nucifraga caryocatactes. Al margen de esas especies, en el resto de la hoja son identificadas la Cottus poecilophus, Petasites kabliklauds, Crocus heuffelianus, Vipera verus, Carabus vanolosus, Corydalis cava, Picus canus, Albies alba, Dendrocopos leucotos, Lyns lynx, Pyrrhula pyrrhula, Strix uralensis, Daphne mezereum, Bombina variegata, Galanthus nivalis y Triturus montandoni. Los especialistas en flora todavía podrán identificar media docena más de especies.

Han sido impresos en offset combinado con hueco de plancha que hoy nos transportan hasta las tierras ubicadas en Moravia y Valaquia, en el sudeste de la denominada Silesia Checa, al sur de Polonia y al norte de Eslovaquia [región de Orava]. Tienen una abundante capa vegetal, predominan las pináceas y los elevados picos, el más alto el de Babi hora ( 1725 metros ) que se localiza entre las fronteras de Polonia y Eslovaquia (la zona aquí se denomina Zywiec Beskids).

La parte mesetaria de las montañas se utilizó entre el XV-XVII como zona de pastoreo estival. En las tierras moravas, los valles más populares son los de Frenstat y Roznov. El curso fluvial del Ostravice las divide en dos. En el este nos encontraríamos con Lysa hora (y sus picos Travny y Ropice). Al oeste del río los picos más importantes son Smrk, Knehyne y Radhost. Al sur del valle de Roznov siguen la denominadas montañas Vstein (Vysoká Vsacká Tanecnice). Finalmente las denominadas Hostyn (Klecsky Javornik y Hostyn) conectan al grupo montañoso por el oeste con el curso del río Vsetinska.

El hábitat de este privilegiado entorno es de una gran biodiversidad y relativamente bien conservado. Los sellos muestran algunos de los muchos ejemplos de su fauna y flora que hemos recogido por su taxonomía científica que hará más fácil la búsqueda de datos para los temáticos, mientras que el nombre checo nos habría dificultado esa información.
Aunque cuenta con menos construcciones históricas, la Moravia Septentrional , al margen de sus bellezas naturales, como los montes filatelizados hoy, tienen otros interesantes rincones para el visitante. Es el caso de Roznov pod Radhostem en donde uno puede disfrutar de uno de los lugares turísticos y de descanso más interesantes de toda la región y, desde esa base, tendremos también uno de los mejores lugares para intentar conocer la región de la Valaquia morava.

En Roznov su museo al aire libre es uno de esos encuentros que resulta difícil olvidar: decenas de edificaciones que en sus lugares de origen posiblemente habrían desaparecido, se conservan aquí para la posteridad y se conforma uno de esos lugares de ensueño para la cultura del ocio de nuestro tiempo y, sin querer, nos trasladan a otra época. No olvidemos tampoco que los valacos prácticamente fueron barridos de la región durante el Imperio de los Habsburgo pero, los que escaparon de aquella etapa histórica, lograron conservar su estilo de vida, sus costumbres y su lengua hoy es un atractivo más para el viajero.

Ese Museo o skansen tiene tres secciones diferenciadas, el poblado de madera con casi un centenar de edificios, la mayoría del XVIII; el poblado valaco y donde los críos disfrutan de lo lindo cuando observan la vida tradicional y como los rebaños pastan como antaño, hay festivales de invierno y verano (febrero o julio), en este último lo más entretenido es el retorno de los herederos que emigraron a Texas y que disfrutan de sus rodeos, sus carnes a la brasa y todo lo consustancial a un festival en donde nunca falta el alcohol. El valle de los molinos será el último, pero no por ello menos interesante a pesar de no poder ser visitado de manera individualizada. Los que se atrevan a ir, conviene saber que existe incluso la posibilidad de arrancar con el autobús que nace en Praga.

Hubo cuatro sobres de primer día y otras tantas tarjetas máximas realizadas por su servicio filatélico. Las cancelaciones fueron realizadas en Novy Hrozenkov (búho en el matasellos, Strix uralensis, sello de 13 coronas, el único que no coincide matasellos y sello). En Horni Becva (facial de 17 coronas, ilustración con la cabeza de un gato silvestre); en Velké Karlovice (facial de 21 coronas, Urdus arctos) y en Roznov pod Radhostem (facial de 25 coronas con la cabeza del lobo en el matasellos). La ilustración de los sobres es alusiva a la especie filatelizada, sólo el matasellos del primer valor no concuerda y nos hace suponer que las tarjetas máximas deben haberse confeccionado con otras marcas o simplemente al gusto de cada coleccionista que ese día de “hartaría de curvas” y disfrutaría en su peregrinar de las impresionantes bellezas de una región donde la naturaleza se enseñoreó.

JUAN FRANCO CRESPO
lacandon999@yahoo.es

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Juan Franco Crespo

Maestro de Primaria, licenciado en Geografía, doctor en Historia de América.

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