Orígenes
Las universidades en América nacen debido a la lejanía de los centros españoles encargados de la formación superior. América necesitaba personal civil y eclesiástico para ocupar cargos de responsabilidad. Así comienzan a surgir las universidades a partir de los colegios y estudios que habían establecido las órdenes religiosas.
En nuestro país se puede considerar al Colegio Franciscano de San Bernardino como el antecedente de los estudios superiores. Este colegio, originalmente jesuita, queda a cargo de la Orden de San Francisco en 1767 cuando los jesuitas son expulsados de América por orden de Carlos III. En 1787 se instala una Cátedra de Filosofía y en 1793, la de Teología.
Proceso fundacional (1833-1849)
La Universidad Mayor de la República surge a la vida pública el 18 de julio de 1849 cuando se realiza su inauguración e instalación solemne en la capilla de San Ignacio en cumplimiento del Decreto del 14 de julio de 1849 promulgado por el Presidente Joaquín Suárez.
Sin embargo, el proceso de su fundación comienza dieciséis años antes, el 11 de junio de 1833, cuando la ley propuesta por el entonces Senador de la República, el Presbítero Dámaso Antonio Larrañaga, es aprobada. Esta ley dispuso la creación de nueve cátedras. De acuerdo con ella, el Presidente de la República debería decretar formalmente su instalación cuando la mayoría de las cátedras encontraran ejerciéndose. Surge así la Casa de Estudios Generales que, en 1836, ya tenía establecidas las cátedras de Latín, Filosofía, Matemáticas, Teología y Jurisprudencia.
El 27 de mayo de 1838, el Presidente Manuel Oribe emite un decreto que convierte a la Casa de Estudios Generales en Universidad Mayor de la República. El 28 de mayo, el Poder Ejecutivo envía a las Cámaras un proyecto de Ley Orgánica para la institución que había sido redactado por Dámaso Antonio Larrañaga pero que no pudo ser considerado al desatarse la guerra civil en nuestro país (Guerra Grande).
El Presidente Joaquín Suárez en su decreto del 14 de julio de 1849, manda cumplir inmediatamente las normas establecidas en 1833 y 1838 y en la ceremonia de inauguración, el 18 de julio de 1849, es designado Rector el Vicario Apostólico Lorenzo A. Fernández, sucesor del fallecido Dámaso Antonio Larrañaga como principal jerarquía eclesiástica nacional. A pesar de que parecería que la nueva institución queda bajo el poder de la Iglesia, en realidad el control real lo ejerce el Estado a través de su Ministro de Gobierno.
La Universidad comienza a funcionar en la Casa de los Ejercicios, en las actuales esquinas de Sarandí y Maciel. Durante su primer semestre de vida, la Universidad Mayor de la República se aboca a la redacción de su Reglamento Orgánico que es aprobado por decreto el 2 de octubre de 1849 y que reprodujo el modelo de universidad napoleónica, la cual ponía bajo la órbita de la Universidad la totalidad de la instrucción pública: primaria, secundaria y superior.
De acuerdo a este reglamento, la enseñanza superior fue agrupada bajo la denominación de “científica y profesional” en cuatro facultades: Ciencias Naturales, Medicina, Jurisprudencia y Teología. La administración quedó a cargo de un rector, un vice-rector y un consejo. A su vez, se creó la Sala de Doctores cuya función era la de evaluar la gestión de las autoridades y proponer, mediante el voto de sus integrantes, la terna de candidatos a Rector. Esta Sala es la antecesora de la actual Asamblea General del Claustro y estaba integrada por consejeros, catedráticos y graduados. La mayoría de los graduados eran bachilleres y a su vez, estudiantes de la Facultad de Jurisprudencia, la única que funcionó durante las dos primeras décadas.
Primera etapa. La Universidad Vieja (1850-1885)
Esta primera etapa abarca la existencia de la Universidad bajo su primera estructura institucional vigente a partir del Reglamento Orgánico aprobado por el decreto del 2 de octubre de 1849 basado en el modelo de Universidad napoleónica que comprendía la totalidad de la instrucción pública: primaria, secundaria y superior. El año lectivo de 1850 comienza con sesenta estudiantes inscriptos.
En 1861 se crea la cátedra de Economía Política, a través de la cual se canalizó, en los años ’70, la definición mayoritaria de la comunidad universitaria a favor de los principios civilistas y liberales.
En 1865 se crean las cátedras de Procedimiento Judicial e Historia Universal y en 1869 la de Derecho Constitucional.
En este período se da el primer enfrentamiento directo entre la Universidad y el gobierno. El 30 de marzo de 1864 el gobierno comunica a la Universidad que se creó una comisión para proyectar y proponer al Poder Ejecutivo cambios en la Instrucción Pública.
La Universidad convoca inmediatamente al Consejo Universitario el cual se disuelve debido a la renuncia de todos sus miembros quienes declaran violada la autonomía universitaria.
Es la época de la guerra civil comenzada en 1863 que finaliza el 20 de febrero de 1865 cuando el Gral. Venancio Flores entra en Montevideo. El 22 de marzo el Consejo Universitario se restituye y celebra su primera reunión después de su auto-disolución.
En 1876 se funda la Facultad de Medicina con las cátedras de Anatomía y Fisiología a las cuales se agrega, en 1877, la de Patología General. La Facultad de Medicina mantuvo un fuerte enfrentamiento con la Comisión de Caridad del actual Hospital Maciel hasta 1890.
En 1877 el Gobierno del Coronel Lorenzo Latorre promulga la Ley de Educación Común, propuesta por José Pedro Varela, la cual deja fuera del ámbito universitario a la enseñanza primaria.
En 1881 el Rector Alfredo Vázquez Acevedo presenta una reforma del reglamento de estudios que enfrenta al Consejo Universitario con el Ministro de Gobierno, debido fundamentalmente, a que este último consideraba que el proyecto atacaba el derecho individual presente en la ley de enseñanza libre.
Nuevos enfrentamientos se dan a partir de 1882 cuando el gobierno invita a la Universidad a asociarse a un proyecto de reforma por el cual desaparecería su autonomía y su independencia.
Si bien este reglamento finalmente no es aprobado por el Parlamento, produce una respuesta de la Universidad dirigida por el Rector José Pedro Ramírez, quien presenta un informe a la Sala de Doctores en 1883 indicando que sus ventajas (reorganización de la Universidad y construcción de un nuevo edificio) no son suficientes frente a sus importantes desventajas: dependencia del Ministerio de Gobierno primero y del de Instrucción Pública más tarde, supresión de la Sala de Doctores y elección de los miembros del Consejo Universitario por el gobierno.
El 15 de octubre de 1884 el gobierno decreta la intervención de la Universidad destituyendo a sus autoridades. El Presidente, Gral. Máximo Santos, ofrece el rectorado nuevamente a Vázquez Acevedo quien acepta luego de llegar a un acuerdo con el Presidente sobre un estatuto nuevo, cambio de local, presupuesto para bibliotecas y otras mejoras.
La reforma del estatuto universitario lograda en esta oportunidad restringe su autonomía. A partir de ahora el Consejo Universitario pasa de tener 40 miembros a siete: el rector, tres decanos (el de Secundaria, el de Derecho y el de Medicina) y tres vocales designados por la Sala de Doctores. En la Sala de Doctores ya no estarán presentes los estudiantes que la integraban desde 1878. Entre lo positivo de la reforma está la creación de decanatos y la mudanza de la Universidad del viejo edificio de Maciel y Sarandí a Uruguay entre Río Branco y Convención.
Se da en esta etapa una importante discusión filosófica a la interna de la Universidad entre la tendencia espiritualista que había gobernado la Universidad durante sus dos primeras décadas y la nueva corriente positivista que terminó conquistando la Universidad.
(1) La Reforma Escolar, como proceso, se inició a finales de 1868. En esa fecha, José P. Varela, junto a un grupo de jóvenes intelectuales, crearon la «Sociedad de Amigos de la Educación Popular» (SAEP) dirigida a promover la reforma de las escuelas, inspirados en las doctrinas estadounidenses y argentinas (Horacio Mann y Domingo F. Sarmiento). Luego de un período de experiencias privadas, con la creación de una escuela modelo -la «Elbio Fernández»- la edición de obras pedagógicas, el dictado de cursos para maestros, etc., José P. Varela tendrá la oportunidad de llevar a la práctica esas ideas en el sistema público. El gobierno de facto del Cnel. Latorre, a propuesta de su ministro J. Ma. Montero -amigo de Varela- designó a éste para un importante cargo educacional, lo que le permitió elaborar un proyecto de Ley de Educación que incluía no sólo la gratuidad de la enseñanza primaria -algo ya conocido y practicado- sino también la obligatoriedad de la asistencia, limitaciones severas a la enseñanza religiosa (bastaba la oposición de un solo padre para que ella no se impartiese en el aula) y una alta participación popular en la administración y orientación de la escuela pública: los padres, a través de las Comisiones de Distrito Escolar elegían indirectamente al Inspector Nacional de Instrucción Primaria. El gobierno, en 1877 promulgó la ley, pero modificando el proyecto original y aceptando solamente la gratuidad y obligatoriedad; estableció, en cambio, la enseñanza religiosa -con escasa limitación- y un sistema de gobierno escolar ultracentralizado.
Segunda etapa. El nacimiento de la Universidad Moderna (1885-1908)
Convencionalmente, esta etapa se extiende desde la Ley Orgánica del 14 de julio de 1885 hasta la del 31 de diciembre de 1908.
En el primer período (1885-1899) la Universidad entra en una época de grandes cambios: vuelve al positivismo y es gobernada por Alfredo Vázquez Acevedo en forma autoritaria: 1891-1893 y 1895-1899.
Se reorganizan las Facultades de Medicina y Jurisprudencia, esta última pasa a llamarse de Derecho y Ciencias Sociales, y se crea la de Matemáticas que comienza a funcionar en 1888 brindando estudios de arquitectura, agrimensura e ingeniería.
La Universidad reabre sus cursos de enseñanza secundaria que cerró en 1877 por la ley de libertad de estudios. Estos cursos fueron complemento y ampliación de los primarios y preparaban para el ingreso a las carreras profesionales.
En 1893 se instala el Instituto de Higiene Experimental, el primero en su género en América Latina, con el cual la Universidad se abre a la investigación científica con el estudio de los problemas vitales para el desarrollo social.
Cuando Vázquez Acevedo deja el rectorado de la Universidad en 1899, ésta cuenta con aproximadamente 500 estudiantes, ha duplicado su capacidad locativa al mudarse al Hotel Nacional, en las actuales calles Cerrito y Juan Lindolfo Cuestas, y ha recibido equipos, instrumental y bibliografía científica actualizada de Europa.
En 1903 se crea la Facultad de Comercio donde se trasladan los cursos de Contabilidad que funcionaban en Derecho y en 1907 se inaugura la Facultad de Agronomía y Veterinaria conformada por dos escuelas de las que sólo se instaló la de Agronomía.
En 1904 asume el rectorado Eduardo Acevedo, quien como estudiante había integrado la Sala de Doctores en la década de los ’80. Recién se había firmado la pacificación del país en Aceguá que pondría fin a un siglo de inestabilidad política.
El Presidente José Batlle y Ordóñez apoya la gestión de Eduardo Acevedo destinando a la Universidad importantes fondos que provenían de los excedentes de la agro-exportación, del ordenamiento de las finanzas públicas y del crédito del país.
La Ley Orgánica de 1908, aprobada el 31 de diciembre de ese año, determina el desmantelamiento de la estructura unitaria de la Universidad y culmina con la renuncia de Eduardo Acevedo al rectorado por el deterioro de sus relaciones con el Presidente Claudio Williman.
La nueva ley reduce la autonomía de la Universidad, entre otros puntos, el nombramiento del rector ya no se realiza a través de una terna que la Universidad envía al Poder Ejecutivo sino que es designado directamente por el Presidente de la República. Además el gobierno debe aprobar los programas de estudio y uno de los puntos más importantes es la separación de las Escuelas de Agronomía y Veterinaria de la Universidad. De aquí en más las otras facultades (Medicina, Derecho y Matemáticas) pasan a ser autónomas dirigidas por sus respectivos Consejos, cambiando la unidad universitaria por una descentralización que la convierte en una federación a la que se llamó “consorcio de tres facultades”.
Sin embargo, esa ley tuvo otros elementos considerados como avances importantes. Los docentes pasaron a integrar los Consejos de Facultades y así a intervenir en la dirección de las mismas, también los estudiantes lograron una representación, aunque indirecta, en los Consejos.
Además se consagró la libertad de estudios secundarios que se subdividieron en dos ciclos: el segundo correspondía al bachillerato diferenciado, según la opción a seguir.
El principio de la autonomía universitaria, traducido en el derecho de la Universidad a darse su propio estatuto y a elegir sus autoridades y catedráticos, estuvo presente en el Primer Congreso Internacional de Estudiantes Americanos realizado en Montevideo en febrero de 1908: la soberanía universitaria radica en los estudiantes, docentes y egresados, establecían. Estos movimientos fueron los que influyeron en la Ley Orgánica de 1908 que incluye una representación estudiantil indirecta y en las leyes de creación de nuevas facultades en las décadas siguientes.
Tercera etapa. El Reformismo (1908-1935)
Esta etapa se extiende desde la ley de 1908 hasta la ley de 1935 que separa de la Universidad a la enseñanza secundaria. Se caracteriza por la consolidación de las estructuras creadas por la ley de 1908 y por un importante aumento de la población estudiantil debido a la ley de gratuidad de la enseñanza.
Bajo la vigencia del nuevo Régimen Orgánico que descentralizó y dio autonomía técnica al gobierno de las facultades, éstas se multiplican: en 1915, la de Matemáticas se divide en Arquitectura e Ingeniería; en 1925 se crea la de Agronomía sobre la base que surgió de la Escuela; en 1929 se crean las facultades de Odontología y Química y Farmacia como escisiones de la de Medicina; en 1932, sobre la base de la Escuela de Comercio, se crea la Facultad de Ciencias Económicas y de Administración; en 1933 la de Veterinaria surge de la Escuela.
El Movimiento de la Reforma Universitaria de los estudiantes de la Universidad de Córdoba en 1918 llegó con fuerza a nuestro país entre 1920 y 1930 y generó la aparición de Asambleas de Claustro con participación estudiantil y carácter reglamentario en distintas facultades.
En abril de 1929 nace la Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay (FEUU) en medio de nuevas ofensivas del movimiento reformista. En 1930 tiene lugar el Primer Congreso Nacional de Estudiantes en el cual participan delegaciones de todo el país y el tema básico es la Reforma Universitaria y en 1931 se realiza en Montevideo el Congreso Universitario Americano con representación estudiantil.
El 31 de marzo de 1933 se produce el Golpe de Estado de Gabriel Terra que encuentra a los universitarios politizados y preocupados por los avances del fascismo. La Universidad se transforma en un activo polo de oposición al nuevo régimen. La primera etapa de espontánea resistencia se concentra luego en el rechazo a la Ley Orgánica del 2 de marzo de 1934 que vulnera una vez más la autonomía universitaria: sanciona una sujeción administrativa total de las autoridades al gobierno nacional. La respuesta son huelgas estudiantiles y manifestaciones callejeras.
La Asamblea General del Claustro se reunió entre 1934 y 1935 y elaboró el Estatuto de 1935 en el cual se planteaba la reestructura de la Universidad en su organización interna y en sus fines, priorizando los problemas de interés general por encima del acrecentamiento del saber o la capacitación profesional. El Estatuto quedaría como un proyecto y el 11 de diciembre de 1935 una ley determina la separación de la enseñanza secundaria de la Universidad.
Cuarta etapa. La conquista de la autonomía y el cogobierno (1935-1958)
Esta etapa se extiende desde el Proyecto de Estatuto Universitario surgido de la Asamblea General del Claustro en 1935 hasta la sanción de la Ley Orgánica de 1958 por la cual se rige actualmente la Universidad de la República.
En 1945 se incorpora la Escuela de Bibliotecnia a la Universidad (actual Escuela Universitaria de Bibliotecología y Ciencias Afines) y se crea la Facultad de Humanidades y Ciencias, centro de docencia e investigación reclamado durante muchos años.
A partir de 1935 y fundamentalmente, en la década de 1940, la Universidad discute varios proyectos de estatuto que no logran acuerdo unánime y son rechazados, fundamentalmente por diferencias entre docentes y estudiantes. La Constitución plebiscitada en diciembre de 1951 introduce la disposición de que los diferentes niveles de la enseñanza serán regidos por consejos directivos autónomos y que el Consejo Directivo de la Universidad será designado por los órganos que la integran y conforme a la ley sancionada al respecto.
Este camino lleva a que, finalmente, el Claustro universitario elabore, luego de muchas discusiones, un proyecto único de la Universidad que, el 7 de abril de 1958 el Rector, Dr. Mario Cassinoni, eleva al Ministerio de Instrucción Pública quien lo remite inmediatamente al Parlamento.La Lucha por la autonomía fue dura, hubo sectores que enfrentaron a la Universidad entendiendo esta actitud como peligrosa para la estabilidad del país. Durante los seis meses que corrieron entre abril y octubre de 1958, la Universidad giró en torno a la confrontación con los poderes políticos. Luego de enfrentamientos callejeros, de una prolongada huelga de las autoridades universitarias y de los estudiantes, de la ocupación de la Universidad, el proyecto de ley es aprobado con leves modificaciones por el Parlamento. Esta ley consagra los concursos para elegir docentes, la gratuidad total de la enseñanza, la autonomía universitaria en todos los aspectos y el cogobierno conformado por docentes, estudiantes y egresados.
La Ley Orgánica del 29 de octubre de 1958 concreta para la Universidad un sentimiento de unidad que se venía gestando desde tiempo atrás ya que por imposición de la ley de 1908 la Universidad poseía una estructura de federación de instituciones que funcionaban aisladamente sin coordinación, repetían servicios, competían por los fondos presupuestales y se regían por reglamentos diferentes.
Quizá un inicio de labor integradora tomó cuerpo en el área de la salud con la base del Hospital de Clínicas “Dr. Manuel Quintela”. El establecimiento, cuya integración a la Universidad se obtuvo tras un polémico proceso, arduas gestiones e intensa lucha gremial en 1953, brindó de inmediato posibilidades a la labor de asistencia y de extensión y al desarrollo científico. Si la organización interna determinó desde el comienzo un trabajo coordinador, su emplazamiento físico y el espacio disponible atrajeron a su entorno nuevas unidades, configurándose un verdadero centro universitario de la salud.
A partir de la aprobación de la ley de 1958, el Estado ejerce tres tipos de controles sobre la Universidad:
1.el Tribunal de Cuentas sobre la contabilidad y los dineros
2.el Tribunal de lo Contencioso-Administrativo sobre los actos administrativos
3.un control de carácter político. El Poder Ejecutivo, con venia del Senado, puede remover a los consejeros universitarios por ineptitud, delito u omisión en el cumplimiento de la función y por la comisión de actos que afecten el buen nombre de la Institución.
(2) Los artículos 205 y 206 de la Constitución de 1951 corresponden a los artículos 202 y 203 de la Constitución actualmente en vigencia.
Quinta etapa. Hacia la “Universidad nueva” (1958-1973)
Esta etapa va de la Ley Orgánica de 1958 al golpe de Estado de 1973. Es una etapa de críticas y proyectos con una preocupación constante por incidir en la vida productiva y cultural del país desde una perspectiva latinoamericana.
Se crean comisiones de bienestar estudiantil y acción social para asistir a los estudiantes mediante becas, comedores, un proyecto de hogar estudiantil, y de esa manera, permitir el acceso de sectores más amplios de la sociedad a las carreras universitarias.
Se crea el Departamento de Extensión, se instalan las estaciones agronómicas experimentales en el litoral, se crean las “carreras cortas” o “carreras auxiliares” en la rama de la salud, se dan experiencias pilotos de extensión universitaria: Pintos en el interior del país (pueblos de ratas) y Barrio Sur y Aparicio Saravia en Montevideo, realizando tareas interdisciplinarias entre estudiosos de la salud, el urbanismo y la vivienda. Se crea el Instituto de Economía en la Facultad de Ciencias Económicas desde donde se estudia el estancamiento productivo y la inflación creciente en el Uruguay.
En 1964 se funda la Federación de Docentes Universitarios del Uruguay (FDUU) que luego se convertiría en la actual Asociación de Docentes Universitarios del Uruguay (ADUR).
En 1967 tiene lugar en la Universidad un seminario, conducido por Darcy Ribeiro,
sobre las modificaciones que se debían realizar a un modelo de Universidad latinoamericana basado en el modelo europeo y que se adaptaba cada vez menos a las necesidades del Continente.Ese mismo año el Rector Oscar Maggiolo elabora el “Plan de Reestructuración de la Universidad” como punto de partida para la discusión del “Plan de Política Universitaria” para el quinquenio 1968-1972.
En el período que va de 1958 a 1973 las relaciones Universidad-Poder Ejecutivo se hacen cada vez más difíciles debido a los constantes enjuiciamientos que la Universidad realiza a los gobiernos de turno. Pero es a partir del gobierno de Jorge Pacheco Areco y de 1968 en particular, cuando esta relación se vuelve más conflictiva y enfrentada. El 14 de agosto de 1968 muere el primer estudiante universitario, Líber Arce, en un enfrentamiento con la policía, poco después, ese mismo año, mueren Susana Pintos y Hugo de los Santos y las muertes vuelven a hacerse presentes en 1970 y 1971 con Heber Nieto y Julio Spósito, aunque estos dos últimos eran estudiantes pero no de la Universidad.
La ley de educación redactada por Julio María Sanguinetti y aprobada en 1972
, determina que los delegados a los claustros universitarios deben ser elegidos por voto secreto y obligatorio a nivel nacional y bajo la fiscalización de la Corte Electoral.El 27 de junio de 1973 se produce el Golpe de Estado y Juan María Bordaberry disuelve el Parlamento.
El 12 de septiembre de 1973 se realizan las primeras elecciones universitarias con voto secreto siendo elegidas, en los tres órdenes, las corrientes favorables a mantener la autonomía y opositoras al régimen dictatorial vigente.
El 26 de octubre la Corte Electoral comunica a la Universidad el resultado oficialmente y ésta queda en posición de instalar a las nuevas autoridades. El 27 de octubre (sábado) un estudiante de Ingeniería Mecánica muere en su facultad y se pretexta que el estudiante manipulaba una bomba. Ese mismo día las fuerzas armadas ocupan todas las facultades y escuelas y el edificio central. Al día siguiente se conoce el decreto 921/973 por el cual el gobierno interviene la Universidad clausurándola y ordenando la detención y el sometimiento a la justicia militar del rector y de todos los decanos y miembros del Consejo Directivo Central.
El Ministro de Educación y Cultura se hace cargo de la Universidad. La política que caracteriza la intervención es la persecución y la destrucción.
(3) Darcy Ribeiro: creador y fundador de la Universidad de Brasilia, exiliado en el Uruguay y docente de la Universidad de la República.
(4) Ley 14.101 denominada Consejo Nacional de Educación y promulgada el 4 de enero de 1973.
Sexta etapa. La intervención (1973-1985)
Durante 1974 hubo muy poca actividad: se definían las nuevas condiciones de funcionamiento. Casi el 40% de los docentes fueron destituidos, renunciaron o no se les renovó el contrato a su vencimiento. Los cargos vacantes fueron cubiertos por designación directa. El movimiento estudiantil fue desarticulado y un régimen policiaco se instaló en los locales paulatinamente rehabilitados. Se cerraron varias carreras universitarias y sus respectivos servicios, se desmanteló la estructura académica, se sustituyeron planes y programas de estudio.
En 1975 comienzan a aplicarse mecanismos restrictivos a la admisión de estudiantes y se establece el examen de ingreso a la Universidad de la República, primero en Medicina y Odontología y en 1980 se generaliza. En 1982 se impone un sistema de cupos prefijados.
Después del Plebiscito de 1980, cuando los uruguayos le dijeron no a la nueva constitución propuesta por el Poder Ejecutivo, se empezó a gestar la reinstitucionalización del país y el renacimiento universitario a través de sus estudiantes.
En setiembre de 1983 los estudiantes organizados en la Asociación Cultural de Estudiantes de la Enseñanza Pública (ASCEEP) realizan la Marcha de la Primavera, tercera
gran manifestación popular del año que comienza en la Facultad de Derecho y culmina con la lectura de una proclama en la cancha de Defensor-Sporting en el Parque Rodó.El 21 de agosto de 1984, poco después se suscribirse el acuerdo del Club Naval entre políticos y militares, el Ministro de Educación y Cultura anuncia el cese de la intervención en la Universidad. En algunos casos se nombran autoridades interinas y en otros, continúan las mismas.
Durante los doce años que dura la intervención, la Universidad deja de investigar, de hacer extensión y su nivel de enseñanza decae. En resumen, dejaron de cumplirse los fines de la Universidad establecidos en el Artículo 2° de su Ley Orgánica.
(5) La primera fue el acto del 1° de mayo en Gral. Flores y Agraciada frente al Palacio Legislativo y la 2a., el caceroleo del 25 de agosto.
Séptima etapa. El regreso a la ley de 1958 (1985 a 2006)
Durante 1984, en las reuniones de la CONAPRO (Concertación Nacional Programática), se acordó entre los representantes de los partidos políticos y las organizaciones sociales la forma cómo la Universidad procesaría el cambio de autoridades.
La Ley No. 15.736 del 2 de marzo de 1985, con vigencia al 25 de febrero del mismo año, reguló la asunción de las autoridades legítimas de la Universidad de la República. Las elecciones para instalar consejos “transitorios” se hicieron ajustándose en lo posible a los términos de la Ley Orgánica de 1958 y a las ordenanzas universitarias anteriores a la intervención.
Se reimplantó el cogobierno de los tres órdenes y se reeligieron los decanos y el rector que fueran destituidos en 1973. Se reincorporaron docentes y funcionarios no docentes destituidos por la intervención y en setiembre de 1985 se realizaron las elecciones de Claustros, Consejos y luego de Decanos y Rector para asumir la dirección de la Universidad por los siguientes cuatro años, hasta 1989. Fueron reelectos algunos decanos y el Rector Samuel Lichtensztejn.
La Universidad inicia así el camino de la renovación científica y tecnológica, la adecuación de sus carreras y el desarrollo de la docencia, investigación y extensión para ajustarse a la nueva situación en que se encontraba el país, la sociedad y el mundo.
Se comienza a recorrer, entonces, un camino de apertura en torno a cuatro ejes: apertura institucional, social, regional e internacional.
A nivel institucional se comienza una política de convenios y acuerdos de cooperación con organismos estatales y empresas privadas para la ejecución de trabajos de investigación y asistencia técnica lo cual brinda oportunidades a estudiantes e investigadores para extender sus actividades hacia el análisis y la búsqueda de alternativas a los problemas nacionales.
Entre los programas iniciados en esta época, debe destacarse el PEDECIBA (Programa de Desarrollo de las Ciencias Básicas) creado en octubre de 1986 por un convenio entre el Poder Ejecutivo, representado por el Ministerio de Educación y Cultura, y la Universidad de la República, y con la activa participación del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). Entre 1993 y 1997 el CONICYT (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas) colaboró en la administración de fondos del préstamo CONICYT-BID para ciencia y tecnología. La Ley de Presupuesto Nacional de 1995 establece al PEDECIBA como programa permanente. El Programa se desarrolla en cinco áreas: biología, informática, física, matemática y química.
La apertura social de la Universidad consiste en su constante preocupación por realizar y difundir sus estudios sobre los problemas de la sociedad uruguaya, ampliando sus vínculos con diversas organizaciones sociales (sindicatos, asociaciones profesionales y de productores, cooperativas, etc.), labor que comprende actividades de investigación, extensión y asistencia.
La apertura regional ha llevado a la Universidad a un proceso de descentralización abriendo servicios en el interior del país: la Regional Norte, las estaciones experimentales y las casas de la Universidad y Centros Universitarios que se han ido creando en los distintos departamentos.
La apertura internacional ha consistido en promover la integración regional con universidades de los países limítrofes y una política de convenios con organismos internacionales, universidades y fundaciones de todo el mundo intentando superar el aislamiento al que fue sometida por la dictadura.
A nivel interno también se procesan cambios estructurales que se proponen romper con la federación de facultades que existe desde la ley de 1908 y así se comienza a agrupar las facultades por áreas de conocimiento: Ciencias Agrarias, Artística, Ciencias y Tecnologías, Ciencias de la Salud, y Ciencias Sociales y Humanas ; se crean redes temáticas y se da mayor flexibilidad a las carreras y una mayor vinculación entre las disciplinas afines de los servicios de enseñanza.
Uno de los problemas que deben enfrentar las nuevas autoridades es el gran aumento en el número de estudiantes que continuará creciendo en los años siguientes y para lo cual no hay infraestructura suficiente. Los locales no alcanzan para albergar a los estudiantes y tampoco hay suficientes docentes. La relación docente-estudiante se hace crítica en algunos servicios. El presupuesto que el Poder Ejecutivo y el Legislativo le otorgan a la Universidad no se acerca a lo que ésta solicita y así continúan superpoblándose las aulas y disminuye el poder adquisitivo de sus funcionarios docentes y no docentes.
Esta situación instala en la Universidad y en el país la discusión acerca de la restricción del ingreso y el cobro de matrícula, discusión aún en trámite aunque a la interna de la Universidad se continúan defendiendo sus principios básicos de autonomía, cogobierno, gratuidad e ingreso libre.
En junio de 1989 el Cr. Samuel Lichtensztejn deja el rectorado y el Ing. Químico Jorge Brovetto asume el cargo en el que permanece ocho años, hasta 1998 (dos períodos).
En este período se crean las facultades de Ciencias y la de Humanidades y Ciencias de la Educación de la antigua Facultad de Humanidades y Ciencias, se crea la Facultad de Ciencias Sociales (1989, comienza a funcionar en 1991) unificando cursos que se dictaban en la Facultades de Derecho, Ciencias Económicas y la Escuela de Servicio Social, el 15 de marzo de 1994 se crea la Facultad de Psicología. La Escuela Nacional de Bellas Artes y la Escuela de Enfermería dependiente de la Facultad de Medicina se transforman en institutos asimilados a facultad en 1994.
Se crean en este período, además, las Comisiones Sectoriales de Investigación Científica – CSIC (1990), de Extensión y Actividades en el Medio (CSEAM) y la de Enseñanza (CSE), unidades académicas cogobernadas encargadas de dirigir el desarrollo de la Universidad en sus respectivos campos.
En 1992 se crean la Comisión Sectorial de Educación Permanente y el Servicio Central de Educación Permanente para dar una respuesta orgánica a las demandas de actualización profesional de los egresados de la Universidad.
La Asociación de Universidades del Grupo Montevideo surge en agosto de 1991 cuando los rectores de las universidades que la componen suscriben un Acta de Intención Fundacional en Montevideo. El proceso fundacional llevó aproximadamente un año hasta que, aprobados sus Estatutos, la institución fue anotada en el Registro de Personas Jurídicas de Derecho Internacional Uruguayo. Las doce universidades que se integraron a este proceso son públicas, autónomas y autogobernadas y ponen a disposición de las demás sus recursos humanos y materiales.
A su vez la Universidad acrecentó sus vínculos con la Unión de Universidades de América Latina (UDUAL) con sede en México, de la cual es miembro fundador (1949) y de la que forman parte la mayoría de las universidades latinoamericanas, públicas y privadas.
En 1998 el Ing. Químico Jorge Brovetto deja el rectorado y el cargo es asumido por el Ing. Rafael Guarga.
En julio de 1999 la Universidad festeja los 150 años de su instalación: actos y festejos con importantes invitados se suceden recordando su larga y prolífera trayectoria.
En el mes que la Universidad cumplía sus 150 años, la Facultad de Ciencias inaugura su nuevo edificio en Malvín Norte. La estructura del edificio corresponde a la planeada residencia universitaria propuesta por el Rector Mario Cassinoni (1954-1964) que quedó a medio construir.
En el año 2000 comienza en el Área Artística un proceso tendiente a conformar una Facultad de Artes unificando en un solo servicio a la Escuela Universitaria de Música y al Instituto Escuela Nacional de Bellas Artes. Al día de hoy el proceso no se ha completado pero se encuentra muy avanzado, colaboró con esto la adquisición por parte de la Universidad de la República del edificio del ex-Liceo Francés en Av. 18 de Julio entre Gaboto y Emilio Frugoni que fue cedido a la futura Facultad de Artes.
En agosto de 2004 una resolución del Consejo Directivo Central transforma al Instituto Nacional de Enfermería asimilado a Facultad, en la Facultad de Enfermería. La antigua Escuela Nacional de Enfermería dependiente de la Facultad de Medicina se había convertido en instituto asimilado a facultad en agosto de 1994.
En el año 2005 un nuevo proceso de conformación de una facultad da comienzo. La Licenciatura en Ciencias de la Comunicación y la Escuela Universitaria de Bibliotecología y Ciencias Afines, servicios dependientes del Rectorado, dan los primeros pasos hacia la conformación de la futura facultad de la comunicación y la información.
En sesión del 6 de diciembre de 2005, el Consejo Directivo Central toma conocimiento del texto del decreto de transferencia del Instituto Superior de Educación Física (ISEF) a la Universidad de la República.
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Paris, M. Blanca ; Oddone, Juan. La Universidad y la sociedad uruguaya: viejas y nuevas propuestas. En: Cuadernos de Política Universitaria. Año 1, N° 1. Montevideo : CIPE-ASCEEP-FEUU, may. 1986.
Sistema de Gestión de Resoluciones [sitio Web]
Disponible en: http://www.expe.edu.uy/expe/resoluci.nsf/index.htm (fecha de acceso: feb. 2006)
Universidad de la República (Uruguay). Breve historia de la Universidad de la República. Montevideo : Universidad de la República, 1998. Colección del Rectorado
Van Aken, Mark. Los militantes. Una historia del movimiento estudiantil universitario uruguayo desde sus orígenes hasta 1966. Montevideo : Fundación de Cultura Universitaria, 1990.
Información procedente de la Universidad de la República Más información en la web de la Institución –>Aquí |