Se espera que, solamente el cambio climático extinga aproximadamente una cuarta parte, o más, de todas las especies en la tierra en el año 2050, superando incluso a la pérdida de hábitat como la mayor amenaza para la vida terrestre. Las especies en los océanos y en agua dulce también están en gran riesgo por el cambio climático, especialmente los que viven en ecosistemas como los arrecifes de coral, que son muy sensibles a las temperaturas más cálidas, sin embargo, la magnitud de ese riesgo aún no ha sido completamente calculada.
El cambio climático representa una amenaza pues para la biodiversidad, las diferentes especies han evolucionado para vivir dentro de ciertos rangos de temperatura, y cuando estos son superados, y una especie no puede adaptarse a las nuevas temperaturas, o cuando las otras especies de las que depende para vivir no pueden adaptarse, por ejemplo, su suministro de alimentos, se amenaza su supervivencia (biopedia.com).
El IPCC ha pronosticado que para el año 2100, suponiendo que las tendencias actuales en la quema de combustibles fósiles continúen, la superficie de la Tierra se calentará en un promedio de hasta 6 grados Celsius (alrededor de 11 grados Fahrenheit) o ??más. No es posible predecir cómo la mayoría de las especies, incluida la nuestra, y como la mayoría de los ecosistemas, deberán responder a este calentamiento extremo, pero los efectos probablemente serían catastróficos.
Para tener una idea de lo que supondría un calentamiento de la superficie media de hasta 6 grados centígrados, considere lo siguiente:
De todos los cambios que hemos visto hasta la fecha, se han atribuido al calentamiento global la fusión de los glaciares, el hielo marino, el permafrost, el blanqueo y la muerte de los arrecifes de coral, las tormentas extremas y las inundaciones, sequías y olas de calor, y cambios en los territorios de los diferentes organismos y el momento de su ciclo biológico, el calentamiento medio de la superficie de la Tierra desde finales del siglo 19( con la Revolución Industrial), ha sido de menos de 1 grado C.
La temperatura media de la superficie de la Tierra durante el pico de la última glaciación, hace 20.000 años, cuando grandes zonas de América del Norte, el norte de Europa y el norte de Asia estaban bajo una capa de hielo de 2 millas y más de espesor, era de unos 6 grados C más frío de lo que es ahora.
¿Debemos preocuparnos? Lo más sensato ahora es ocuparnos. Indirectamente cada uno de nosotros contribuimos al calentamiento global, y cada uno de nosotros puede contribuir a frenarlo, las vías para hacerlo existen. El reciclaje, el ahorro de energía y la creación de conciencia entre nuestros allegados son algunas de las mejores y más fáciles maneras de hacerlo, depende de ti.