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l 23 de diciembre de 1911 se dejaba atrás la isla Macquarie. A las 4 de la tarde del 29 de diciembre se escuchó el primer hielo golpear en el costado de estribor. El 7 de enero de 1912, una bahía que Mawson llamó de la Comunidad de Naciones se abrió ante ellos. En otro lado alejado de la bahía estaba un cabo que identificó como el Decouverte, la extensión más oriental de la Tierra de Adelia que Dumont d'Urville divisara en 1840.

A las 4 de la tarde del 8 de enero se arrió un bote y se remó hacia la orilla. Cuando estaban cerca de tierra vieron un grupo de isletas que más tarde se llamaron Mcckellar. Descansando sobre las rocas había cientos de focas de Weddell y pingüinos Adelia. Los hombres pusieron pie en tierra y caminaron por ella, eran los primeros en pisar el Continente Antártico entre el cabo Adare y Gaussberg, una distancia de aproximadamente 2000 millas. El cabo Denison, como ahora se llamaba, llegó a ser la base principal de operaciones de Mawson.

El 19 de enero se completó la descarga. Ya con enero finalizando, el Aurora navegó a lo largo de la costa dejando un grupo de ocho hombres en la zona occidental y regresando al cabo Denison. Para el 30 de enero las instalaciones habían sido terminadas y se alojaban en ellos 18 hombres.

En febrero los vientos arreciaron. Permanecer en el exterior suponía un peligro extremo. Los días en calma eran realmente tan raros que los quehaceres diarios se convirtieron en una rutina. Todo el tiempo de marzo y abril fue una sucesión de temporales. El viento alcanzó a menudo más de 100 millas por hora; de vez en cuando llegó a alcanzar rachas inimaginables de 200 millas/hora. El promedio de velocidad del viento durante todo el mes de mayo medido hora a hora fue de 60,7 millas/hora. El 15 de mayo la media calculada durante un corto periodo de sólo 24 horas fue de 90 millas/hora. El viento condicionó sus vidas durante prácticamente todo el invierno.

A pesar de las peligrosas condiciones del tiempo, a finales de febrero Mawson, Cecil Madigan el meteorólogo y R. Bage el astrónomo, decidieron arriesgarse a una corta inspección del área. Plantaron banderas y viajaron poco más de 5 millas antes de que el tiempo les obligara a retroceder.

Bage y Meth en la Cueva de Aladdin

Uno de los proyectos importantes era levantar dos mástiles de radio. Se comenzó el 4 de abril, pero no se pudo completar hasta el 1 de septiembre. Algunos trabajos había que realizarlos con vientos de 60 millas/hora, y el 13 de octubre la instalación completa cayó a tierra. De todas formas, durante el tiempo en que las antenas estuvieron operativas, se pudieron enviar mensajes al Aurora e isla Macquarie. No se pudo restablecer la comunicación hasta el 13 de febrero de 1913 (el invierno de 1912 se llenó de largos periodos de inactividad).

El 9 de agosto Mawson, Madigan y Ninnis, iniciaron una expedición hacia el Sur en medio de vientos de 40 millas/hora. Después de 5,5 millas de lucha continua los hombres excavaron un refugio en el hielo al que llamaron La Cueva de Aladdin, donde instalaron un depósito de suministros. En septiembre llegaron cinco días de sorprendente buen tiempo; varios hombres cargaron comida y equipos y los trasladaron a la Cueva de Aladdin. Mientras tanto, otras tres expediciones probaban a aprovechar los días de calma.

Mawson dio instrucciones a cada expedición para limitar su respectivo viaje a 14 días y 50 millas. Dos de las expediciones sufrieron 80 millas de viento obligándoles a avanzar muy lentamente. Mientras, otra expedición sólo pudo alcanzar 2,5 millas. La que se dirigió hacia occidente pudo sin embargo realizar 50 millas, pero regresó helado y exhausto. Durante el mes de octubre, el tiempo fue tan malo que no se pudo realizar salida alguna.

En noviembre el tiempo mejoró proyectando Mawson ir más lejos. Cinco expediciones se pusieron en marcha: tres hacia el Este, uno al Polo Sur magnético y otro al Oeste. Mawson indicó a sus hombres que no deberían regresar más tarde del 15 de enero, en que el Aurora estaría esperando para recogerles.

La expedición del Sur llevada por Bage, sufrió ventarrones muy fuertes y complicó las lecturas que Webb debía tomar para seguir la ruta del polo magnético. El punto más lejano lo alcanzaron el 21 de diciembre, cuando el tiempo y la comida escaseaban. Webb calculó que se encontraban aproximadamente a sólo 50 millas del Polo Sur Magnético.

Los ocho hombres de la expedición de occidente sufrían sus propios contratiempos. Las condiciones de tiempo eran severas. A finales de 1912 se dedicaban a la instalación de un refugio pero comenzaban con mal pie, la antena de radio quedó destruida en la primera ventisca. Durante todo el invierno los hombres trabajaron de 10 de la mañana a 1 de la tarde con vientos de hasta 100 millas/hora. Las casetas llegaron a quedar ocultas por la nieve. En agosto ya se organizaban viajes en trineo para establecer depósitos de reserva y trazar el litoral. El glaciar Denman complicó muchos las excursiones por la cantidad de peligrosas grietas que ocultaba. Pudieron no obstante cruzar el glaciar Elena y descubrir el lugar donde anidaban los pingüinos. El día de Navidad llegaron a Gaussberg, descubierto diez años antes por Drygalski. Toda la expedición de occidente fue recogida por el Aurora el 23 de febrero de 1913.

Las expediciones más cercanas trabajaron a lo largo del cabo Denison y los  glaciares de la zona. Mientras, la expedición de la costa oriental llevada por Madigan disfrutaba sin duda del paisaje más hermoso de todas ellas.

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