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Geografía
PAÍSES
Turquía - 2ª parte
Geografía humana Geografía económica
ntre 1960 y 1990 la población de Turquía se duplicó; esto se fundamenta en el crecimiento del índice de natalidad, que ha determinado una pirámide poblacional con una base de un 35 % de personas menores de 15 años. Sin embargo, más de 3 millones de turcos viven fuera de su país, asentados fundamentalmente en Alemania, Francia y Holanda. La población de este Estado euroasiático está compuesta fundamentalmente por turcos (85 %), kurdos (20 %) y árabes (1,2 %). Existen también comunidades de griegos, georgianos y armenios.
La religión mayoritaria en Turquía es la musulmana. En la imagen, la mezquita de Estambul
Desde el año 1514, en que se pactó la primera división del Kurdistán (tradicional territorio perteneciente al pueblo kurdo), Turquía, al igual que los demás estados en que hay población kurda, se ha negado a otorgar a este pueblo la región SE del país, donde está asentado. El «problema kurdo» se ha transformado en uno de los más importantes para el gobierno turco, que no ha dejado de reprimir a los grupos independentistas.
La religión mayoritaria en Turquía es la musulmana, aunque existen también minorías de ortodoxos, gregorianos, judíos, católicos y protestantes. El grado de urbanización es alto a pesar de que las actividades agrícolas ocupan a la mitad de la población activa. Las máximas concentraciones urbanas, donde se asienta casi la mitad de los habitantes, se localizan en las ciudades de Istanbul y Ankara. Otros centros urbanos de importancia, cuya población supera ampliamente el medio millón de habitantes, son Izmir, Adana y Bursa.La agricultura ha sido tradicionalmente la base principal de la economía turca; sin embargo, en los últimos años ha cedido protagonismo al sector de los servicios, representado sobre todo por el turismo. Los cultivos ocupan más del 32 % de la superficie del país, las áreas forestales cubren el 3,9 %, los prados y pastos el 11 %, los bosques el 26 % y el resto del territorio está sin cultivar o es improductivo. Las plantaciones están distribuidas en diferentes áreas. La Anatolia se divide en 4 regiones agrícolas: 3 exteriores, las zonas marítimas del mar de Levante, del Egeo y del Ponto, y una interna, de meseta.
Entre las regiones exteriores, en la meridional, que es la más calurosa, se cultiva algodón, cítricos y vid. En la región egea, expuesta a la influencia mediterránea, predominan la vid, el higo, los cítricos y el almendro. En la zona del Ponto abundan los bosques, así como las plantaciones de tabaco y maíz. El cultivo principal de la meseta es la adormidera, una planta papaverácea de la que se extrae el opio. Los cereales se cultivan en todas las regiones y entre ellos predominan el trigo, la cebada, el centeno, la avena, el mijo y el arroz. Otros cultivos industriales destacados son la remolacha azucarera, el lino, el sésamo, el girasol, los cacahutes y el cáñamo. Existen además grandes producciones de frutas (manzanas, melocotones, peras, ciruelas y albaricoques). A pesar de esta diversificada producción, la agricultura turca carece de infraestructura, ya que los métodos empleados son todavía arcaicos.
La ganadería, trashumante, es importante dentro de la economía; predominan los ovinos, los caprinos (entre los que destacan las cabras de Angora) y los bovinos. Existe también un buen número de caballos, camellos, mulos y asnos; en la parte occidental de Anatolia y en Tracia es tradicional la cría del gusano de seda. La pesca predomina en la región del mar de Mármara y en el estrecho de Bósforo; dentro de esta actividad sobresale la captura de esponjas. El subsuelo turco proporciona minerales de hierro, mercurio, molibdeno, manganeso, plomo, cinc, cobre, cromo, bauxita, uranio, carbón y lignito. La producción de petróleo, concentrada en Selmo, Garzan, Germik y Raman, no cubre las necesidades del país. La industria, impulsada por el Estado, está en plena expansión, especialmente en los sectores metalúrgico y mecánico.
El sector textil se ha convertido también en una destacada fuente de ingresos para el país; sobresalen la manufactura del algodón y la producción de hilados de rayón, lana y fibra sintética. Así mismo, son importantes la fabricación de cemento, vidrio, cerámica, papel y productos químicos. Sin embargo, Turquía carece de infraestructura tecnológica, lo que ha llevado al país a una fuerte dependencia del exterior en esta área. El turismo, que en 1992 motivó la llegada de más de 5 millones de visitantes, es en la actualidad uno de los principales ingresos.