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Antecedentes históricos

l comportamiento de los cuerpos cargados eléctricamente se conoce desde hace siglos. Los antiguos griegos observaron que al frotar el ámbar contra un trozo de piel o de lana, se producía una fuerza invisible. Esta fuerza atraía y sostenía en el ámbar pequeños objetos, como pedacitos de papel, plumas, briznas de paja o virutillas de madera.

Más tarde se descubrió que otras muchas sustancias, como el cristal cuando se la frota con seda, ebonita cuando se la frota con piel o lana, y otros como la resina o el azufre, producían el mismo efecto que el ámbar en lo que respecta a la atracción de pequeños objetos no metálicos.

En el año 1600 se hizo un esfuerzo por explicar esta fuerza invisible. El científico William Gilbert clasificó todas las sustancias entonces conocidas en dos grupos, eléctricas y no eléctricas. Eléctrica era cualquier sustancia que poseyera las mismas propiedades que el ámbar, y no eléctrica la que careciera de ella. La palabra electricidad derivada del griego electrón (ámbar) es hoy en día un término usual.

En el siglo XVIII se descubrió que muchos otros objetos, incluso el cuerpo humano, puede electrizarse. Benjamin Franklin y el francés DuFay, experimentaron con materiales electrificados. DuFay observó que cuando se frotaba un trozo de cristal con una piel de gato, ambos se electrificaban. El cristal atraía los objetos que eran repelidos por la piel de gato y viceversa. Partiendo de esta observación sacó la conclusión de que había dos clases de energía eléctrica exactamente opuestas. Franklin también observó estas dos cargas diferentes e introdujo los términos POSITIVO (+) y NEGATIVO (-) como medio para identificarlas.

Benjamin Franklin (1706-1790)

Franklin definió como cuerpo cargado positivamente aquel que tiene la misma carga o acción que un trozo de cristal frotado con un paño de seda; y cargado negativamente al que tiene la misma carga o acción que un trozo de ebonita frotado con una piel de gato. También definió eléctricamente como NEUTRO si el cuerpo no se cargaba por ningún medio.

Los experimentos de Franklin, DuFay, y otros científicos refutaron la teoría de W. Gilbert de que toda la materia estaba dividida en dos clases, eléctricas o no eléctricas. Además de aquellos estudios se ha desarrollado la actual explicación de la estructura atómica de la materia.

El siglo XIX produjo muchos científicos que contribuyeron al desarrollo de la electricidad hasta convertirla en la fuente de energía más utilizada actualmente. Galvani descubrió el primer método químico de producir electricidad, y Volta usando este descubrimiento construyó la primera pila.

Thomas Alva Edison (1847-1931)

C.F. Bush hizo el primer arco de  luz para el alumbrado de las calles, y Edison inventó la primera lámpara incandescente eficaz. Pero, probablemente, uno de los mayores descubrimientos fue el que hizo Faraday, al comprobar que la electricidad también podía producirse por inducción magnética. Esto trajo el desarrollo del generador, que suministra la mayor parte de la energía eléctrica utilizada en la actualidad.

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