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Conservación
GESTIÓN Y RESTAURACIÓN
La gestión forestal - 2ª parte
La gestión forestal sostenible
a gestión forestal con fines de producción maderera se está ampliando en el sentido de gestión forestal sostenible. Ésta viene dada por la presión creciente sobre los recursos del bosque que han llevado a muchas superficies selváticas a la deforestación, tras la explotación desmedida y sin un control basado en el equilibrio entre producción y regeneración. Además, ahora se demandan nuevos servicios y bienes con origen en los bosques, que deben ser tenidos en cuenta dentro las actividades de la gestión forestal.
Las nuevas actividades de la gestión forestal sostenible abarcan múltiples objetivos, no sólo en lo concerniente a la conservación y explotación de los recursos forestales, principalmente la madera, sino también aquellos que tienen una función de bienestar psicológico para el ser humano, como las áreas para fines recreativos, o que por la calidad pintoresca de los parajes permitan habilitarlos para la contemplación paisajística.
Las nuevas actividades de la gestión
forestal sostenible también abarcan aquellas
que tienen una función de bienestar
psicológico para el ser humano, como las
áreas para fines recreativos o
contemplativos. En la foto: Cascadas
Multnomah en el bosque nacional del Monte
Hood (Oregón - Estados Unidos).
También entran dentro de las actividades de gestión forestal sostenible, la captura de animales, recolección de frutos y plantas medicinales, y conservación de los recursos hídricos para mantener los acuíferos de donde pueden servirse las poblaciones humanas. En definitiva, la gestión forestal sostenible está condicionada a objetivos no sólo económicos, sino también sociales y ambientales.
La ordenación de montes
La ordenación de montes se encarga de establecer la forma en que pueden ser aprovechados los recursos forestales, mediante la planificación, gestión y control englobados en el concepto de desarrollo sostenible. La caza, explotación de la madera, actividades recreativas, recolección de frutos, así como la protección de las cuencas hidrológicas o control de la erosión, entre otras, son actividades que pertenecen a esta disciplina de las Ciencias Forestales.
La ordenación de montes tiene su ámbito de actuación en lo que se denomina sistema forestal (monte en su acepción más sencilla), es decir, superficies de terreno sin cultivar y no sujetas a actividades industriales o urbanas.
La protección de las cuencas hidrológicas y el
control de la erosión son actividades
contempladas en la ordenación de montes.
El sistema forestal o monte propiamente dicho lo componen los bosques con densidades arbóreas superiores al 20% (montes arbolados densos), matorrales y pastizales con superficies arbóreas entre el 5 y 20% (monte hueco), dehesas (monte arbolado hueco) y las superficies próximas o colindantes con los ríos o el mar (riberas).