Natureduca - Portal educativo de ciencia y cultura |
Agricultura
REPRODUCCIÓN
Las semillas - 1ª parte
a semilla es el embrión de la planta una vez ha alcanzado la madurez. Cuando la semilla es puesta en un medio y condiciones adecuadas germina una planta (la plántula), que dará lugar a un nuevo vegetal.
Este sistema de reproducción es sexual, pues la semilla es el producto de la unión del polen y el óvulo; la planta resultante será diferente a la planta madre, y sólo los caracteres específicos y varietales obtenidos de sus dos parentales se mantendrán. Únicamente en la reproducción asexual, es decir, mediante la multiplicación vegetativa a partir de esquejes, injertos, acodos, división de mata, etc., conservan caracteres idénticos a la planta madre.
La semilla es el embrión maduro de la planta
Germinación y viabilidad
La germinación es el conjunto de fenómenos que se desarrollan en la semilla cuando pasa del estado de vida latente al de vida activa, es decir, cuando reanuda el crecimiento embrionario después de su periodo de descanso. El fin último de la germinación es producir una planta semejante a aquella de la cual procede la semilla.
Con la germinación, la semilla pasa de un estado de vida latente al de vida activa
La viabilidad de una semilla, es decir su capacidad de germinar y transformarse en nuevas plantas, no es una característica lineal. La germinación puede ser un proceso inmediato después de que las semillas se hayan dispersado, o pasar previamente por un periodo de descanso más o menos largo que dependerá de las condiciones ambientales.
El poder de germinación de las semillas varía mucho de unas especies a otras; mientras que en algunas dura escasos días después de su diseminación, otras pueden conservarlo latente a lo largo de varios años (en algunos casos hasta miles de años). Así, las semillas del sauce pierden todo su poder de germinación a los pocos días de desprenderse del árbol; y en el caso de una ninfeácea como es el loto blanco de Oriente (Nymphaea lotus), se ha demostrado que puede germinar después de 3.000 años.
Algunas semillas, como las del loto blanco (Nymphaea lotus),
conservan su poder de germinación incluso después de 3.000 años
Es necesario respetar el periodo de viabilidad de cada especie, ya que sólo así se garantizará la producción de plantas fuertes y sanas. Las semillas que se distribuyen comercialmente suelen estar sujetas a determinadas leyes de calidad y pureza en cada país; los análisis y controles de viabilidad (índices de viabilidad), permiten establecer una garantía porcentual de que determinados lotes de semillas serán viables, y que no diferirán de la variedad deseada.