CONTAMINACIÓN - TERRESTRE: Doñana 1998, ¿tragedia con final feliz...? - 1ª parte
Natureduca: Naturaleza educativa
 Menú principal - Índice principal Menú rápido - Índice rápido Contacto Buscar artículos aquí 200 usuarios conectados

 

/natureduca/contaminacion-terrestre-donana-1998-tragedia-01

Contaminación

TERRESTRE

Doñana 1998, ¿tragedia con final feliz...? - 1ª parte


1 2

letra capitular El 25 de abril de 1998 el desastre se cernió sobre la reserva natural con más diversidad de fauna y flora de toda Europa, el Parque Nacional de Doñana (Huelva-España).

Las consecuencias de aquella catástrofe podrían estar latentes a lo largo de muchos años de este nuevo siglo XXI.

70 km. de carga letal

Durante la madrugada del día 25, esta gran diversidad de vida animal y vegetal quedó pendiente de un hilo. 60 Km. al norte del parque se rompía una de las presas de las minas de cobre-pirita de Aznalcollar, que almacenaba aguas contaminadas por metales pesados.

La presa de las minas de Aznalcollar derramó cinco millones de metros cúbicos de agua y lodos tóxicos
La presa de las minas de Aznalcollar derramó cinco millones de metros cúbicos de agua y lodos tóxicos

En pocas horas los ríos Agrio y Guadiamar, tras recibir cinco millones de metros cúbicos de agua y lodos tóxicos procedentes de la presa accidentada, distribuyeron la letal carga a lo largo de 70 Km., y en algunos puntos del cauce hasta incluso los 500 metros de ancho. Una espesa capa de lodos negros y ácidos arrasó a su paso toda la fauna del río, envenenando vegetación y cultivos en un espacio de terreno superior a las 3.600 hectáreas.

Los ríos Agrio y Guadiamar distribuyeron la letal carga a lo largo de 70 Km
Los ríos Agrio y Guadiamar distribuyeron la letal carga a lo largo de 70 Km.

Las obras y labores de limpieza

Las primeras medidas tendieron a la construcción de diques en el lugar de Entremuros, puesto que en ese punto el río Guadiamar hace entrada en el parque. De esta forma se desvió la riada hacia el río Guadalquivir, evitando que penetrase en las marismas. El Guadalquivir recibió gran cantidad de aguas tóxicas que, dentro del perjuicio causado, suponía un mal menor si Doñana quedaba a salvo.

Las labores de limpieza del parque fueron arduas. En muchos lugares había lodos que alcanzaban hasta los 80 cm. de espesor. Al mes y medio de la catástrofe se había retirado sólo el 20% (algo más de 300.000 metros cúbicos). Mientras tanto, los lodos tóxicos probablemente hayan penetrado en los acuíferos. Elemento vital del parque es el agua. Bajo él existe una balsa de unos 3.400 km/2. llamado acuífero 27; se trata del recurso hídrico más importante del lugar; en épocas en que este recurso escasee será más fácil de que las aguas contaminadas se bifurquen por zonas sensibles para la vida animal y vegetal.

El alcance del desastre ecológico

Tras el accidente, las primeras impresiones fueron las de una gran catástrofe ecológica de incalculables proporciones, muy superior a la descrita, pero, posteriormente, se rebajó ese calificativo en base a que las zonas más sensibles del Parque, "aparentemente",  solo habían sufrido efectos colaterales; ¿tragedia con final feliz...?.

En realidad, "un desastre ecológico" puede producirse localizadamente, en un ecosistema concreto, destruir todo o parte de la vida animal y vegetal, y tras un periodo de tiempo en que se producen determinadas sucesiones retornar a las condiciones iniciales. Pero en ecología nada es tan simple, ningún elemento está aislado; existen interrelaciones, algunas visibles y otras muchas que pasan desapercibidas para los sentidos, más aún para los profanos en el conocimiento de como funcionan los ecosistemas. Por ejemplo, los metales pesados que la riada dispersó pasan a las plantas, y mediante las cadenas tróficas alcanzan a los predadores, los cuales los acumulan en los tejidos grasos; el resultado es un funcionamiento hormonal anómalo, que influye en el comportamiento sexual y, por tanto, en la fertilidad e inmunidad contra las enfermedades.

Sabiendo que gran parte de las especies que habitan Doñana son migratorias, podemos imaginar que ocurrirá en las zonas del norte de Europa donde pasan parte de la temporada. El envenenamiento pues, puede trascender de forma dramática a otros ecosistemas muy alejados del lugar del accidente, por ejemplo en los países nórdicos por medio de las garzas reales.

1 2

  • Ir al índice de la sección
  • Volver atrás
  • Ir a la página anterior
  • Ir a la página siguiente


Visita nuestra web dedoclick Cultura educativa

 Menú principal - Índice principal Menú rápido - Índice rápido Contacto Buscar artículos aquí



Logo Asociación Española para la Cultura, el Arte y la Educación ASOCAE Creative Commons © ASOCAE ONGD, Asociación Española para la Cultura, el Arte y la Educación - www.asocae.org - RNA 592727 - CIF.: G70195805 ¦  Quiénes somos  ¦  Contacto  ¦  Bibliografía ¦  Política de privacidad ¦ Esta web NO utiliza cookies, ni guarda datos personales de los usuarios