Recetas para compartir: Crema de mango y manzana

Hoy, de nuevo, me he puesto a la tarea de elaborar un postre que quiero compartir con todos vosotros. Mi hija me participó el gusto que tiene por un importante fruto tropical, el mango, así que hice un breve recorrido por internet y mis libros de cocina para ver qué encontraba sobre postres, que incluyera este producto como ingrediente. Hallé numerosas recetas de postres con mango pero, en la mayoría o no tenía parte de los ingredientes o me resultaban demasiado elaboradas. Así que tomé ideas de lo que vi y me propuse crear sobre la marcha mi propia receta. Y ésto es lo que he conseguido:

Si en la imagen parece sabroso, os aseguro que he cosechado otro éxito rotundo, mi familia me ha felicitado.

Los ingredientes que he utilizado:

1 mango maduro
2 manzanas (yo utilicé Golden)
2 naranjas
1 limón
6 cucharadas de azúcar
Canela en rama
3 dátiles
3 orejones de albaricoque
Pasas sultanas
Caramelo líquido

Con estos ingredientes me ha dado justo para 3 raciones (1 copa por comensal)

Cómo lo elaboré:

Pelo el mango y extraigo toda la carne dejando el hueso limpio. La añado al vaso de la batidora junto con el zumo de media naranja. Añado 3 cucharadas de azúcar y bato hasta que queda un pasta cremosa. Vierto esta pasta en una taza y lo reservo.

Corto la carne de las manzanas en láminas muy finas (importante que sean finas para que cuezan rápidamente en poco líquido), y la añado a un cazo en el que pongo previamente una rama de canela, los 3 dátiles, los 3 orejones de albaricoque, el zumo de la otra naranja y media que nos quedaba, y también el de un limón entero (el ácido del limón hace que la manzana desprenda más fácilmente el jugo que contiene).

Dejo cocer todo a fuego más bien lento (para que el líquido no se evapore enseguida). Cuando veo que ya queda poco líquido le añado 3 cucharadas de azúcar, remuevo bien y espero a que se haya evaporado casi todo el líquido antes de retirar el cazo del fuego.

Aparto del cazo los 3 dátiles, los 3 orejones y la rama de canela. Añado la compota de manzana que ha quedado al vaso de la batidora (utilizo el mismo vaso sin lavar, con los restos de la pulpa de mango que han quedado). Bato hasta que quede una pasta cremosa.

Tomo 3 copas y voy repartiendo en ellas las cremas de la siguiente forma: Primero hago una capa depositando crema de manzana en el fondo de las copas, seguidamente hago otra capa con la crema de mango que ya tenía apartada.

Remato todo decorando cada copa con 1 dátil y 1 orejón de albaricoque de los que tenía apartado anteriormente. Salteo por encima unas cuantas pasas sultanas. Finalmente le añado unos hilos de caramelo líquido, que terminarán fundiéndose con la crema.

Sólo queda dejarlo en el frigorífico un par de horas antes de consumirlo.

¿Os gusta?

¡Buen provecho!