Todo progreso está basado en el deseo universal
e innato por parte de cada organismo de vivir por
encima de sus posibilidades.
Las máquinas siendo por sí incapaces de lucha,
han logrado que el hombre luche con ellas.
Los más obstinados suelen ser los más
equivocados, como todos los que no han aprendido a
dudar.
El hombre es el único animal que puede ser amigo
de las víctimas que intenta comerse hasta que se las
come.
Se puede hacer muy poco sólo con fe, no puede
hacerse nada sin ella.
Basta el instante de un cerrar de ojos para
hacer de un hombre pacífico un guerrero.
Las máquinas evolucionan y se reproducen a
velocidad prodigiosa. Si no les declaramos la guerra
a muerte será demasiado tarde para resistirse a su
dominio.
La vida es el arte de sacar conclusiones
suficientes a partir de datos insuficientes.
Cuanto más tiempo dura una disputa, más lejos
nos hallamos del final.
La vida es como la música, debe componerse con
el oído, el sentimiento y el instinto, no mediante
reglas.
Es mejor haber amado y haber perdido que jamás
haber perdido.
Mucha gente no puede ni emanciparse, es decir,
no puede ni darse cuenta de la esclavitud en que le
mantiene las ideas en medio de las cuales se ha
educado.