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Lengua
GRAMÁTICA
La oración - 9ª parte
Las modalidades oracionales (continuación)
Oraciones de posibilidad
róximas a las oraciones dubitativas, se distinguen de ellas en que el contenido de la
predicación se ve como posible, es decir, como adecuado a la realidad objetiva.
Frente a la incertidumbre que expresamente indican las dubitativas, se trata
aquí de una posibilidad o probabilidad mayor o menor, que puede, desde luego,
implicar la duda.
Suelen construirse con el condicional o con el futuro de indicativo. La referencia temporal es muy variada: "serían las diez" (pasado), "me comería a gusto un buen filete" (presente o futuro), "lo pasarías muy bien en Barcelona" (pasado o futuro), "te lo habrían dicho" (pasado), "serán las diez" (presente), "te lo habrán dicho" (pasado)... También se emplean perífrasis verbales para indicar posibilidad: "puede costar dos mil pesetas", "debe de vivir en esta casa".
La negación
Las oraciones negativas presentan en castellano una cierta complejidad. Puede negarse el predicado en su conjunto ("el Gobierno no bajará los impuestos", "Luis no puede venir"): son éstas propiamente, las oraciones negativas. Pero puede negarse también un elemento del predicado ("ese libro cuesta no mucho dinero", "Luís puede no venir") o del sujeto, restringiendo su extensión ("no todos los jóvenes son rebeldes").
La marca característica de las negativas es el adverbio "no"; los adverbios "nunca", "jamás", y los pronombres "nadie", "nada" o "ninguno" son también marcas de negación. Cuando van pospuestos al verbo, éste debe ir precedido por "no" ("ninguno ha venido", pero "no ha venido ninguno"): la doble negación, al contrario de lo que ocurre en otras lenguas, no afirma en castellano, sino que enfatiza la negación; sólo la agrupación de "no" con la preposición "sin" sirve para afirmar de manera atenuada ("no sin pena nos despedimos" equivale a "con pena nos despedimos").
Ciertas expresiones tienen también un sentido negativo procedente de su uso habitual en negaciones ("en la vida", "en absoluto").
Las modalidades no enunciativas presentan, cuando son negativas, ciertas particularidades: en las imperativas, el verbo va necesariamente en subjuntivo ("no hagas eso"); "no" + infinitivo parece vulgar en expresiones imperativas, pero no para instrucciones o advertencias de carácter general.
Las interrogativas totales no pueden ser propiamente negativas; quien pregunta negando espera en realidad respuesta afirmativa ("¿no has visto a tus padres?", "¿no vivías en Madrid?").
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