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Origen/distribución: Cultivares
Familia: Rosáceas / Grupo Híbridos de té

l famoso cultivador de rosas alemán Mathias Tantau de Uetersen, hijo (1912-2006), consiguió este hermoso híbrido que ya constituye un clásico de las colecciones de rosas. Se obtuvo a partir de un pie de la variedad "Gloria Dei", y transcurrió algún tiempo antes de que fuera finalmente reconocida. En 1962 recibió un premio en La Haya, sobre todo, además de por su belleza, por la cualidad de su fragancia, pues exhala un aroma intenso y sumamente agradable.

Las hojas, que son ovaladas y con bordes finamente dentadas, presentan un color verde brillante y bronceado; su flor es originalmente rosa oscuro, pero se han conseguido también en otros colores.

Las rosas crecen sujetos a fuertes pedúnculos, en un arbusto vigoroso de porte medio-alto, pudiendo alcanzar alturas de 1 a 1,20 m. Entre sus características se encuentra el resistir bien las típicas enfermedades de los rosales si se toman unas medidas básicas de prevención. Soporta muy bien las condiciones atmosféricas adversas.

Rosa "Prima Ballerina"

Reproducción/cultivo/otros datos de interés

Plantación y cuidados

En climas mediterráneos, se planta el rosal entre octubre y noviembre, procurando dotarle de un suelo sano, bien desinfectado y excavado profundamente. No es crítico si el suelo es arcilloso o arenoso, pero conviene que la tierra esté libre de piedras y sea rica en materia orgánica, que deberá mezclarse bien con el sustrato.

Requiere sol y riegos de forma regular, controlando que sean moderados en la época cálida. En esta época no se debe regar desde la copa, hay que hacerlo directamente sobre el terreno evitando mojar las hojas y las flores, para que la humedad y el calor no provoque la aparición de hongos.

El abonado debe cuidarse sobre todo durante la época de floración, aportando al riego, al menos una vez al mes, abonos a base de nitrógeno, fósforo y potasio. De la cantidad de nitrógeno en el suelo depende la pigmentación verde de las hojas, sin embargo este elemento en exceso puede contrarrestar el crecimiento floral; lo conveniente es suprimir el abonado durante el época final de floración.

La poda se realiza en noviembre o diciembre --según las regiones--, pero lo común es hacerlo cuando pierda sus hojas o se observe que ha entrado en periodo vegetativo.

En los inviernos duros y con heladas es conveniente acolchar la raíz con paja, u otra materia vegetal, que permita la aireación pero evite la formación de la escarcha.

Recolección

Las flores que vayan a ser destinadas a la ornamentación interior, deben cortarse antes de que abran los capullos, sumergiéndolos en agua hasta el cáliz para preservarlos. En condiciones normales se degradan en 48 horas. Es conveniente dotarles de agua fresca cada día para reponer el oxígeno consumido; añadiendo una cucharada de glucosa al agua se conservan frescas más tiempo. Otra opción es adquirir en los comercios especializados unos productos que alargan la vida de las rosas cortadas.



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