Botánica
FLORES ORNAMENTALES
Amarilis (Hippeastrum vittatum)
Origen/distribución: Zonas montañosas del Perú
Familia: Amarilidáceas
l nombre común de esta planta es a la vez el de un género distinto, Amaryllis, si bien Hippeastrum y Amaryllis pertenecen a la misma familia.
Los amarillis son plantas bulbosas. Se cultivan habitualmente como plantas de interior, en maceta, estando también muy difundido su uso como flor cortada, para centros y jarrones. Las flores generalmente tienen forma de trompeta y surgen de la sumidad de un tallo sin hojas, denominado escapo (que mide entre 50 y 60 cm).
Amarilis (Hippeastrum vittatum)
En lo alto del escapo crecen entre dos y cuatro flores, e incluso más, que comienzan a brotar a principios de la primavera. La floración se prolonga hasta el otoño, si bien este período depende del clima de la zona. Si se trata de un clima templado, será así, pero en climas más fríos, el período de floración se reducirá a uno o dos meses. Los híbridos de tonos rojizos y rosados suelen ser los más difundidos para su cultivo en interiores.
Reproducción/cultivo/otros datos de interés
Conviene sumergir los bulbos en agua templada antes de plantarlos. Disponga en el fondo de la maceta unos trozos de tiesto y cúbralos con una corteza de roble o unas hojas de haya. Coloque encima una capa de tierra muy rica en materia orgánica, situando encima el bulbo y dejando que éste sobresalga de la maceta al menos un tercio. Prosiga rellenando con la misma tierra hasta rodear el bulbo. A continuación humedezca la tierra (pero no el bulbo) con agua tibia y no vuelva a regarlo hasta pasados unos diez días, cuando se formen las nuevas raíces y el vástago comience a crecer.
En cuanto la floración comience, riegue cada dos días, manteniendo la tierra húmeda, pero nunca encharcada, y abone con un buen fertilizante. Disminuya los riegos a medida que las flores se vayan marchitando, pero no prescinda totalmente de ellos hasta que las hojas estén por completo amarillas. Entonces se iniciará el proceso de reposo invernal de los bulbos.
Los bulbos pueden hacerse viejos, pero cuidados adecuadamente podrán seguir floreciendo durante varios años más.
Una vez que las hojas se hayan marchitado por completo, retire los bulbos secos y guárdelos en un lugar fresco, en tiestos, a unos 16º C, dejando que descansen hasta finales de la estación fría, en que podrá reiniciarse el proceso de plantación.