La isla caribeña suele ser una administración postal bastante cauta en la emisión de sellos y estos tienen, frecuentemente, una impecable factura. Los de flora y fauna no desengañan a los temáticos que los incorporan a sus colecciones; así que hoy nos detenemos en la emisión realizada el 28 de marzo de 2016 con dos hojitas bloque (4×3,25$ y 1×7$) que nos ofrecen cinco preciosas avecillas de la zona caribeña y usualmente visibles en la isla.
Comencemos por los representados en la hojita de cuatro efectos que muestran la Cinclorcerthia ruficauda que suele ser habitual de las zonas boscosas húmedas; su nido se ubica, frecuentemente, en los huecos de árboles podridos o en palmeras, realizan puestas de dos-tres huevos. El segundo es para la Cypseloides níger, una variedad de vencejo habitual en las zonas montañosas y que su peculiaridad morfológica hace que esté casi de manera permanente en el aire, su puesta suele ser de un solo huevo y ubica sus nidos en pequeñas cavidades de los acantilados; si cae al suelo difícilmente podrá remontar el vuelo porque tiene unas patas muy pequeñas y unas alas muy largas que no le permiten accionar la fuerza suficiente para levantarse y volar.
El tercer facial nos muestra la Tringa semipalmata, una especie típica de las zonas costeras en donde puede observarse buscando su alimentación en arenas o esteros generalmente inundables por el flujo de las mareas, sus nidos los ubica en los aledaños de sus comederos habituales pero a salvo de la acción de las olas, las puestas a veces son de cuatro huevos. Y el último sello de este bloque de cuatro es para el Anous stolidus que es bastante habitual de las aguas costeras o el mar abierto, suele incubar un solo huevo en un pequeño hoyo sobre el suelo o bien busca una hondonada en los roquedales próximos a la costa.
Para el facial de 7$ se ha escogido al multicolor Icterus oberi, ave habitual de la floresta en las zonas de montaña, de hecho es con la especie floral Heliconia caribaea [La flor nacional de Montserrat] con la que más congenia; esta variedad de oriol suele usar esa planta como materia prima para sus nidos, su puesta generalmente es de dos huevos.
Los sellos fueron realizados por el departamento artístico de la norteamericana IGPC, impresos en litografía offset y comenzaron a circular el 28 de marzo de 2016, fueron comercializados dos sobres de primer día que poco a poco se están convirtiendo en materiales de altísimo coste ante el descarado impuesto al que se están viendo sometidas las emisiones postales en todo el mundo, así que cada vez tenemos menos coleccionistas y, sin embargo, los faciales crecen y crecen, año tras año y ello está produciendo un efecto disuasorio y arrinconando la afición ante la falta de nuevas generaciones que releven.
Las administraciones postales, acostumbradas en muchos casos a “cuadrar sus balances” con los filatelistas, ven que mengua su clientela, entonces sacan menos sellos pero aumentan, exponencialmente, los faciales que, junto a los impuestos están convirtiendo los timbres postales en piezas realmente calificables como un impuesto revolucionario que [voluntariamente] abonan los aficionaos al mundo del sello sin ninguna contrapartida por parte del servicio postal emisor ya que en muchos casos, suele darse la circunstancia de no circular correspondencia con franqueo físico, sino mediante inscripciones que acabarán dándole la puya definitiva al mundo del sello: si no se ve será difícil que atraiga la atención de nadie.
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JUAN FRANCO CRESPO
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